TULA DE ALLENDE. El gobernador de Hidalgo, Omar Fayad Meneses, advirtió que no habrá impunidad y pidió a la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) que abra la carpeta de investigación correspondiente para deslindar responsabilidades, por la tragedia ocurrida en la región de Tula.
“No habrá impunidad, pido a las autoridades competentes que deslinden responsabilidades ante estos hechos. No debe de existir especulación, y la sociedad debe de conocer la verdad”, publicó en su cuenta de Twitter.
Ayer, Fayad informó que resultaron afectados tres mil 574 viviendas en los nueve municipios inundados, de los cuales dos mil 30 inmuebles correspondieron al municipio de Tula, 773 en Tlahuelilpan, 598 en Ixmiquilpan
El Ejecutivo estatal informó que están gestionando ante la Secretaría de Gobernación (Segob) que sea declarada zona de emergencia y se destinen recursos federales. Los daños por las inundaciones de los últimos días en Tula y otras ocho demarcaciones se estiman en seis mil 500 millones de pesos.
Mientras, después de ser afectados por el desbordamiento del río Tula, ahora los habitantes del municipio padecen por la falta de agua debido a los severos daños a la infraestructura del sistema de agua potable que ocasionó la salida del afluente que dejó sin servicio a nueve comunidades y colonias, cinco fraccionamientos, parte del primer cuadro de la ciudad y el Centro de Reinserción Social municipal.
El pasado lunes, el desbordamiento del río Tula, a consecuencia del desfogue de la presa Danxhó, ubicada en Jilotepec, Estado de México, provocó que Tula se inundara y que se desalojara a habitantes de nueve municipios de Hidalgo; además, el hecho causó la muerte de 17 pacientes del hospital general del IMSS, y pasado viernes perdió la vida un trabajador en acciones de limpieza.
Los habitantes de Tula han padecido por falta de agua en estos días debido a que los pozos San Lucas Teacalco, Manzanitas 1, 5 de Mayo y Bjay sufrieron daños debido a que las tuberías fueron arrancadas por la corriente de agua o porque las instalaciones de bombeo quedaron inundadas, informó la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Tula (Capyat).
Por lo pronto, continúan las labores de limpieza de la ciudad donde participan 320 efectivos militares de Secretaría de la Defensa Nacional y la Marina, así como 550 funcionarios del municipio y del Gobierno del estado, informó José Ventura Meneses Arrieta, titular de la Secretaría de Obras Públicas y Ordenamiento Territorial (Sopot).
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El Gobierno municipal ya reabrió a la circulación los cinco puentes que conectan al centro de Tula y que permanecían cerrados desde el martes tras la inundación que se registró desde la noche del pasado lunes.
Autoridades informaron que se busca recoger los desechos que fueron depositados en las calles y lavar la vía pública y el mobiliario urbano, trabajos que realizan los gobiernos municipal y estatal, con apoyo de personal de las fuerzas armadas.
