IRAPUATO, Gto. (OEM-Informex). Del primero de enero al ocho de julio, en Guanajuato han sido asesinados 10 jefes policíacos, cuando en el mismo periodo, pero de 2019 iban sólo dos los mandos policiales asesinados a manos de la delincuencia.
De acuerdo con la organización civil Causa en Común, el primer jefe policíaco fue asesinado el siete de marzo. Se trató de Alberto Méndez, quien fue subdirector de la Policía Municipal de Tarimoro. Alberto Méndez era también el enlace del Municipio con el Mando Único Estatal. Su asesinato ocurrió cuando el subdirector de la Policía Municipal salía de su casa en la calle Francisco I. Madero, cuando fue emboscado por hombres armados que dispararon en su contra y aunque fue llevado con vida a un hospital, perdió la vida mientras recibía atención médica.
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El 22 de marzo fue asesinada la comandante de la Policía Municipal de Celaya, Maricela N., cuando se encontraba en su día de descanso y había salido de su casa, ubicada en las inmediaciones de la colonia San Juanico, sólo a conectar la bomba del agua, cuando fue atacada a balazos.
Posteriormente, el primero de abril, un comandante de la Policía Municipal de Jaral del Progreso fue asesinado en la comunidad de La Compañía, en Valle de Santiago, cuando acudió a una barbería a cortarse el cabello y mientras le estaban dando el servicio, fue atacado a balazos y perdió la vida en el lugar.
Junio letal
Junio ha sido el mes con más asesinatos de mandos policíacos. El nueve de junio fue asesinado en una emboscada en la comunidad de Cervera, de Guanajuato capital, un comandante de la Policía Municipal cuando circulaba en una patrulla junto con un compañero; recibió más de 10 balazos durante el ataque.
El 27 de junio fue asesinado en San José Itubride el agente mayor de la Guardia Nacional, Arturo Paz, cuando le hizo la parada a un vehículo que circulaba con vidrios polarizados. De la unidad bajaron hombres armados y dispararon en varias ocasiones al vehículo donde viajaba en solitario el elemento federal, quien falleció en el sitio.
Dos días después, también en San José Iturbide, fue asesinado en un enfrentamiento con delincuentes un comandante de la Policía Municipal de ese municipio, cuando perseguía a sujetos a bordo de una motocicleta que no hicieron caso de detenerse para realizarles una revisión. El ataque ocurrió en las inmediaciones del fraccionamiento Rinconada de los Ángeles.
Al día siguiente, el 30 de junio, el comandante de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado Guillermo Belmán fue asesinado a balazos en Cortazar, cuando caminaba junto con su esposa hacia un local comercial ubicado en la calle Guadalupe Victoria, de ese municipio. Hombres armados lo interceptaron y le dispararon a quemarropa.
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Siguen ataques en julio
El cinco de julio fue asesinado un comandante de la Policía Municipal de Moroleón, cuando sujetos armados lo atacaron a él y a su esposa en su domicilio en el municipio de Uriangato.
Dos días después, el siete de julio, en el municipio de Valle de Santiago fue asesinado el Subdirector de la Policía Municipal de Moroleón, el cual fue atacado junto con su escolta por hombres armados que viajaban a bordo de una motocicleta. El ataque ocurrió cerca en la zona centro del municipio, pues incluso la camioneta en la que viajaba el jefe policial, identificado como Adrián Cervantes, todavía alcanzó a llegar a las inmediaciones de la Presidencia Municipal de ese municipio.
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El caso más reciente ocurrió en Pénjamo, el pasado nueve de julio, donde fue asesinado el director de Tránsito Municipal, Jorge Herrera Reyes, por sujetos que viajaban a bordo de una motocicleta. El jefe de Tránsito iba acompañado de su esposa y fue atacado cuando se disponía a bajar de su camioneta para ir a comprar tabiques en la colonia Bellavista.
Solo dos asesinatos en 2019
De enero a julio de 2019, sólo habían ocurrido dos asesinatos de mandos policíacos: el primero ocurrió el siete de febrero, en Pénjamo, cuando un comandante de la policía de ese municipio fue asesinado en la colonia Lázaro Cárdenas, mientras que el 11 de febrero fue asesinado a balazos en Guanajuato capital el Jefe de Custodios del Cereso Mil, mientras estaba en su día de descanso y cuando llevaba a su hijo a la escuela
