Corea del Norte amenazó el jueves con usar armas nucleares para "hundir" Japón y reducir a "cenizas y oscuridad" a Estados Unidos por apoyar una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y la aplicación de nuevas sanciones tras el último ensayo atómico de Pyongyang.
El Comité de Paz de Asia y el Pacífico de Corea, que gestiona las relaciones exteriores y propaganda de Corea del Norte, también pidió la disolución del Consejo de Seguridad de la ONU, al que calificó como "una herramienta del mal" compuesta por países "sobornados" que actúan bajo las órdenes de Estados Unidos.
"Las cuatro islas del archipiélago deberían acabar hundidas en el mar por la bomba nuclear de Juche", dijo el comité en un comunicado publicado por la agencia de noticias oficial KCNA. "Ya no es necesaria la existencia de Japón cerca de nosotros".
Juche es la ideología gobernante de Corea del Norte que mezcla marxismo y una forma extrema de nacionalismo predicado por el fundador del estado, Kim Il Sung, el abuelo del actual líder Kim Jong Un.
Las tensiones regionales han aumentado notablemente desde que Corea del Norte llevó a cabo su sexto y su más potente ensayo nuclear el 3 de septiembre, incluyendo uno que sobrevoló Japón.
El Consejo de Seguridad de la ONU votó el lunes por unanimidad una resolución redactada en Estados Unidos y una nueva ronda de sanciones, prohibiendo las exportaciones de textiles de Corea del Norte -las segundas en importancia del país- y limitando el suministro de combustible.
Pyongyang rechazó las últimas medidas adoptadas por el Consejo de Seguridad, que tuvieron el respaldo de China y Rusia, reiterando sus amenazas de destruir Estados Unidos, Japón y Corea del Sur.
"Reduzcamos el continente estadounidense a cenizas y oscuridad. Descarguemos nuestra furia mediante la movilización de todas las formas de represalias que se han preparado hasta ahora", dijo el comunicado.
Pese a las amenazas de Corea del Norte, el presidente surcoreano, Moon Jae-in, declaró que no estaba de acuerdo con tener armamento nuclear en su país, ni con desarrollar su propio arsenal o volver a usar las armas nucleares tácticas de Estados Unidos retiradas a comienzos de la década de 1990.
"Responderle a Corea del Norte teniendo nuestras propias armas nucleares no mantendrá la paz en la Península Coreana y podría llevar a una carrera armamentista en el noreste de Asia", dijo Moon en entrevista con CNN.
El Ministerio de Unificación de Corea del Sur dijo además que planeaba entregar 8 millones de dólares mediante la Unicef y el Programa Mundial de Alimentos de la ONU para ayudar a niños y mujeres embarazadas en el norte.
Las últimas amenazas de Corea del Norte además acusan a Japón de "bailar al son" de Estados Unidos, diciendo que nunca debería perdonársele por no ofrecer una disculpa sincera por sus "crímenes contra nuestro pueblo", en una presunta referencia a la ocupación japonesa de comienzos del siglo XX.
Pyongyang también se refirió a Corea del Sur como "traidores y perros" de Estados Unidos.
"Este anuncio es extremadamente provocativo y atroz. Es algo que eleva considerablemente la tensión y es absolutamente inaceptable", dijo el jueves el jefe de gabinete japonés, Yoshihide Suga, en una rueda de prensa.
Desde India, donde se encuentra de visita oficial, el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, llamó el jueves a una aplicación estricta de la resolución de la ONU contra Corea del Norte, diciendo que el mundo debe obligar a Pyongyang a hacer un cambio en sus políticas.