CELAYA, Gto.- (OEM-Informex):- Vecinos de San Martín de Camargo denunciaron un basurero clandestino de más de 300 metros de diámetro y de unos de 50 metros de profundidad en donde tiran estiércol, llantas, muebles y hasta escombros de materiales de construcción.
Por la mañana de ayer se incendió parte de este basurero, lo que provocó la movilización de bomberos que controlaron el incendio y evitó que se extendiera, según vecinos de la comunidad de San Martín de Camargo por el cual cruza el canal de aguas negras y escurrimientos pluviales.
El señor Jorge Robles, de la calle Tercera del Pirules expuso que, hay personas que tiene un establo y tiran el estiércol en dicho basurero clandestino, el cual está a orillas de la autopista Querétaro Salamanca, a 500 metros del entronque de la carretera Celaya salida a San Miguel de Allende.
Comentan que varios vecinos han denunciado el hecho de que los encargados del establo son los mismos que queman las llantas para que se consuma el estiércol, pero las autoridades no han hecho nada hasta el momento, no sólo para clausurar el basurero clandestino, sino para evitar la contaminación del aire con la quema de las llantas.
Y aunque se ha reportado en repetidas ocasiones al municipio, hasta el momento el basurero clandestino es un nido de ratas y un lugar solitario que produce malos olores gran parte del díaJorge Robles
Juan Vázquez, vecino de la calle Pirules 2, comentó que frecuenta una vez al mes para limpiar su terreno baldío, por lo que tiene que quemar la maleza que crece por las lluvias, y con ello evita el criadero de animales; aunque lamentablemente no todos hacen lo mismo.
También expuso que es un gran contaminante el basurero clandestino, porque tiran estiércol que intentan quemar con llantas, contaminando así el medio ambiente, sin contar que el canal también es un contaminante.
Alrededor del socavón también está convertido en un basurero, en donde tiran todo tipo de escombros de construcción, pero también hay animales muertos, muebles viejos, pero, sobre todo, lo que parecía una cabaña, se encuentra totalmente destruida, incluso la cisterna abierta que contiene agua estancada y una plaga de zancudos.
Cabe señalar que se intentó hablar con los propietarios del establo, pero no salieron a dar su punto de vista sobre el estiércol que generan y si son ellos quienes lo queman con las llantas o son otras personas.