CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Para lograr el bien común a través de la preservación del medioambiente, es necesario que los gobiernos, movimientos sociales y la misma Iglesia trabajen en proyectos para crear conciencia ecológica y, es que, a decir de Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, Obispo de la Diócesis de Celaya, en el municipio no se ha dimensionado la problemática que se tiene en el tema del agua, la reforestación y los malos olores que de manera continua se registran en la ciudad.
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En el tema del agua, dijo, los mantos friáticos se están quedando sin este líquido vital, ya que al crecer la población, ante el desarrollo de la agricultura y de la industria cada día se está perforando a una profundidad en la que el agua que sale ya no es potable, sino que incluye metales pesados, también llamados fósiles, que están ocasionando enfermedades como insuficiencia renal, problemas en las dentaduras, entre otros.
Por tal motivo, considera que si actualmente los gobiernos y los diferentes sectores de la población no trabajan para solucionarlo, las futuras generaciones heredarán la problemática, la cual estará llena de conflictos entre pueblos e intereses, tal y como está sucediendo en Rincón de Tamayo, el cual dijo, solo es la punta del iceberg de lo que puede seguir pasando en Celaya y en los municipios que se encuentran en la región.
➡️ Amanece Celaya con mala calidad de aire
“Estamos acostumbramos a que siempre tenemos agua, pero cuando no tengamos para beber será un problema grave. Estamos tarde, pero todavía podemos hacer todavía mucho por el cuidado del agua. El problema es cómo aprovecharla, cómo distribuirla mejor, cómo aprender la cultura del agua y cómo defenderla”.
También mencionó que es importante la captación del agua de lluvia, ya que es un medio fácil para obtener este líquido para su uso y consumo en diferentes sectores, sin embargo, no se hace, sino que se va directo al drenaje o al río contaminándose de inmediato.
El Obispo mencionó que el agua potable es cada día más cara, por ello espera que exista un subsidio gubernamental para que la gente pueda consumirla, además de que considera importante que entre en la canasta básica, debido a que actualmente es más barato comprar un bote de leche que el agua.
Por otra parte, en el tema de la mala calidad del aire que en ocasiones se registra en el municipio a causa de las quemas de pastizales, las industrias, la basura en las calles, entre otros motivos, Monseñor Aguilar Ledesma, mencionó que esto también es resultado de la falta de educación ecológica.
Comentó que parte del cambio climático se da a causa de la contaminación, por tal motivo, exhortó a todos a “cuidar la casa en la que vivimos. Somos sucios, nos encanta tirar basura, debemos ser limpios”.
Añadió que es importante resolver todos estos problemas para evitar que el efecto invernadero y los cambios climáticos extremos provoquen enfermedades. Las industrias por su parte también necesitan educación ecológica, porque en ocasiones contaminan el agua, la tierra y el aire con los diferentes tipos de desperdicios que desechan, que en consecuencia han provocado problemas de salud en la población, por tal motivo dijo que “no por ganar más y obtener mejores recursos vamos a perder nuestra salud”.
Finalmente, exhortó a los gobiernos, movimientos sociales y a los integrantes de la Iglesia a trabajar en conjunto para crear proyectos que los involucren a todos para mejorar la calidad del medio ambiente, a través de campañas de recolección de basura, reforestación, captación y cuidado del agua, entre otros.