CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Los hijos crecen tan rápido que de un instante a otro ya son personas adultas y lo importante es aprovechar al máximo cada momento en cada etapa de su vida, pues es tiempo tan valioso que nada en el mundo no lo va a devolver; expresó Luz Rangel Guerrero, comunicóloga de profesión, artista plástica y madre de familia, quien ha sabido combinar todos sus roles priorizando el cuidado de su hijo.
Ser madre es una gran responsabilidad que implica sobreponer a tu hijo antes que todo
Luz Rangel Guerrero, de 39 años de edad, trabaja para el periódico Redes de la Diócesis de Celaya, es artesana y artista plástica, amante de la pintura que tuvo sus inicios como creadora hace aproximadamente 15 años y madre del pequeño Ángel Yahomel Guevara Rangel, de cuatro años.
Para Luz ha sido complicado vivir al cien por ciento de la pintura, pues hay poca gente que valora el arte y que paga el precio justo de las obras, según mencionó; motivo por el cual comenzó a innovar haciendo pinturas en miniatura para vender sus piezas a precios más accesibles y, posteriormente, incursionar trabajando el mosaico veneciano.
Ha participado en la creación de murales colectivos y, más recientemente trabajó en la decoración de la parroquia de la comunidad Juan Martín; sin embargo, durante los últimos años se ha dedicado a desarrollar sus propias artesanías con piezas de madera que trabaja junto con su padre.
Luz Rangel ha tenido que adaptar todas sus actividades a su papel de madre;asume las responsabilidades que demanda sacar adelante un hogar y una familia, pues su madre y su esposo fallecieron hace algún tiempo y únicamente vive con su padre y con su pequeño hijo.
Señaló que con paciencia y con amor se logra sacar adelante cualquier situación por muy triste o difícil que sea, además de que su hijo junto con su padre, son el motor que la impulsa para luchar contra todas las adversidades.
La situación económica es difícil y en ocasiones se requiere trabajar más para sacar adelante a su familia, expresó; sin embargo, ha preferido sacrificar cuestiones económicas para compartir tiempo de calidad junto a Ángel Yahomel, pues siempre ha creído que tener hijos significa cuidarlos, atenderlos y pasar tiempo con ellos.
Para Luz Rangel ser madre es una gran responsabilidad que implica sobreponer a su hijo antes que todo, incluso cuando nació el pequeño Ángel Yahomel lo llevó consigo a su trabajo hasta que cumplió tres meses, lo ha llevado a todos sus viajes y no estaría dispuesta a separarlo de su lado, pues desde que él nació se dio cuenta que es capaz de hacer todo y dar la vida por él.
Reiterando que ser madre es una de las cosas más hermosas que le ha pasado en la vida, comentó que nada en este mundo vale la pena más que disfrutar y compartir el tiempo con los hijos, verlos crecer y aprovechar al máximo cada momento de su compañía.
Si tu trabajo te ocupa 10 horas, pues réstale dos y pasa esas dos horas con tu hijo, porque crecen tan rápido que no te das cuenta y en un instante ya son grandes. Entonces nadie te va a regresar ese tiempo; aprovéchalo, disfrútalo, velos crecer, juega con ellos y aprende de ellos