CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Este 2019 fue un año complicado para el comercio de hidrocarburo y podría decirse que fue uno de los peores en la última década, dijo Mauricio Rivadeneira, encargado de una estación de servicio de gasolina, debido a que en enero se registró el desabasto de combustible y de marzo a noviembre las ventas no repuntaron.
Aunque en este mes de diciembre se tuvo un incremento en las ventas entre el tres y cuatro por ciento, mencionó que “aún no se tienen síntomas de una mejora económica, porque normalmente es un mes donde la gente tiene más ingreso y se traslada a otros lugares para tener convivencia con su familia, pero el verdadero talón de Aquiles es la inseguridad, mientras no se detenga no habrá mejoría”.
Afirmó que las bajas ventas no se atribuyen a que haya incrementado el número de gasolineras, sino a que la actividad económica está detenida, aunado a la inseguridad que se vive en la zona y el incremento de robo de vehículos.
También dijo que para el año entrante no se prevé desabasto de gasolina como el que se tuvo al iniciar 2019, porque explicó que éste se genera cuando vienen alzas muy grandes en las ventas, lo que no ha ocurrido este año que está a punto de terminar.
Detalló que difícilmente se ve una situación como la que se tuvo en este año, debido a que mediante pipas lo solucionarían, además, que ya tiene un mayor control de los ductos.
Por otro lado, de acuerdo a que el 24 de diciembre el gobierno federal publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) un ajuste al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), éste no será de cinco pesos como se rumoraba en redes sociales y se contempla que el incremento en el producto sea de unos cuantos centavos.
Ante el incremento del combustible señaló que el verdadero problema del municipio es la inseguridad, y hasta que este problema no se combata no se verán mejores resultados.
Aseguró, que este año ha marcado una gran afectación el gremio de la venta de hidrocarburos, esto a comparación de los últimos 10 años.