CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- En México durante el 2021 las tareas del hogar y de cuidados alcanzaron un valor económico de 6.8 billones de pesos, lo que equivale al 26% del Producto Interno Bruto Nacional (PIB), quedando arriba de sectores como el comercio que tiene el 20%, las industrias manufactureras el 18% y servicios inmobiliarios el 10%, así lo dio a conocer Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), a través de los resultados de la Medición Anual del Trabajo No Remunerado.
En el análisis que realizó el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) sobre este tema explica que cuando las actividades que se realizan en el hogar, tal y como, cocinar, limpiar, lavar ropa, cuidar a los niños, enfermos, entre otras cosas, las realizan los integrantes del hogar y no se asocian a un salario, se les conoce como trabajo no remunerado.
De los 6.8 billones de pesos que alcanzaron las tareas del hogar y de cuidados, indica, las mujeres en México aportaron 4.9 billones de pesos y los hombres 1.9 billones de pesos, lo que equivale al 19% y 7% del PIB nacional, respectivamente, es decir, las mujeres aportaron 2.6 veces más valor económico en comparación con los hombres.
Mientras que el valor económico per cápita, equivale a 28 mil 831 para los hombres y 71 mil 524 pesos para las mujeres. Pese a que en 2020 el valor económico total del trabajo no remunerado como porcentaje disminuyó en dos puntos porcentuales, se observa un incremento de tres puntos porcentuales con respecto a 2019.
“Esto se puede explicar por los cambios que se generaron en las dinámicas dentro de los hogares a raíz de la pandemia, ya que 2020 fue el año con mayores restricciones de confinamiento. También se observa que el incremento del valor económico que aportan los hombres como porcentaje del PIB con el 7% y con respecto a 2020 se mantuvo a pesar de la activación económica tras la pandemia”.
“Si el trabajo no remunerado de los hogares fuera un sector, sería el más grande del país por su valor económico, incluso por encima del valor económico del sector comercio, las industrias manufactureras y los servicios inmobiliarios, que aportan 20%, 18% y 10% del PIB nacional, respectivamente”.
También menciona que en 2021 los hogares mexicanos dedicaron en total dos mil 951 millones de horas semanales al trabajo no remunerado, de las cuales las mujeres mexicanas pasan el 64%, lo que suma 40 horas semanales per cápita, es decir, casi un trabajo de tiempo completo de 48 horas a la semana, mientras que en el caso de los hombres, esta proporción es del 27% y equivale a 15.9 horas a la semana.
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“Esta carga desproporcionada, representa una de las principales barreras estructurales para la participación femenina en el mercado laboral, y exacerba las desigualdades en el acceso a mejores condiciones dentro de este”.
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En cuanto al tipo de actividades, menciona que los hombres suelen destinar mayor tiempo a preparación de alimentos, limpieza y cuidado de la ropa, así como proporcionar ayuda a otros hogares y al trabajo voluntario.
“A pesar de los avances, la carga desproporcionada de trabajo no remunerado que realizan las mujeres acentúa la desigualdad de género, al limitar el tiempo disponible que tienen para estudiar, descansar o generar un ingreso propio”.
“Ante este panorama, es necesario reconocer el valor económico de realizar las labores del hogar y de cuidados como sustento para el bienestar social y económico del país. Estas actividades son trabajo y permiten el desarrollo de las infancias, contribuyen al bienestar de las familias y facilitan que otros miembros del hogar participen en el mercado laboral”.
Finalmente, destaca la importancia de tener una corresponsabilidad en las labores del hogar, y para ello, indica que se pueden implementar diferentes acciones entre ellos el romper con los roles y estereotipos de género desde la niñez, fomentar la extensión de los permisos de paternidad y que estos se parezcan más a las licencias de maternidad, así como ofrecer flexibilidad de horarios y trabajo remoto para mujeres y hombres”, ya que asegura, “sin igualdad en el hogar, difícilmente se alcanzará igualdad en el mercado laboral”.
