CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Amor, respeto, confianza, cariño y comunicación, son los elementos que han caracterizado a la pareja integrada por María Teresa Briones de Martínez y Carlos Martínez Inda, quienes se encuentran celebrando 70 años de feliz matrimonio.
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Por lo que este 14 de febrero celebrará como día a día lo hacen, el amor incondicional que se tienen, mismo que ha permanecido intacto como hace70 años que iniciaron esta aventura y después de seis años y medio de noviazgo decidieron unir sus vidas en sagrado matrimonio.
María Teresa y Carlos procrearon 10 hijos: Carlos, Tere, Norma, Ricardo, Eduardo, Aracely, Guillermo, Mayra, Georgina y Karen a quienes han educado con valores, enseñándoles la importancia de la familia, el matrimonio y la unión, elementos que han seguido al pie de la letra con sus familias e hijos, destacando que actualmente, en total, su núcleo familiar cercano con hijos, nietos y bisnietos es de 95 personas.
Carlos nos compartió en entrevista la importancia del matrimonio y la fórmula que ha seguido para conservarlo intacto.
“El noviazgo es la base fundamental del matrimonio, debe verse como algo formal y serio, en el que se conoce a la persona tal cual es, y no esperarse a conocer cuando se está casado, desgraciadamente, actualmente los jóvenes ya no creen en el matrimonio ni ven el noviazgo como algo serio, y cuando deciden casarse, se dan cuenta que no es lo que querían y se divorcian, mi consejo es que vivan el noviazgo y lo tomen como una preparación para el matrimonio, amen a su pareja y la disfruten, que tomen las cosas en serio”.
“Siempre cada día despierten a su pareja con un beso y con un te amo y estén convencidos que desean pasar hasta el último de sus días con él o ella, ámense, respétense y compartan ideas, y cuando vengan hijos espérenlos y recíbanlos con todo su amor”, añadió.
Mientras que María Teresa nos compartió: “Me tocó un esposo de oro, estoy muy agradecida con la vida y con Dios por ponerlo en mi camino, siempre está al pendiente de mí y aunque ahora lo pienso y sé que nos casamos muy jóvenes, a los 22 años, es una decisión de la que no me arrepiento y doy gracias a nuestras familias por respetarnos y apoyarnos”.
“Tengo unos grandes hijos y de ellos también hemos aprendido, siempre están al pendiente de los dos y estamos muy orgullosos de ellos y de la familia que hemos formado” expresó.