ACÁMBARO, Gto.- (OEM-Informex).- Durante los últimos 11 años se han logrado tres hallazgos de suma importancia de restos fósiles de mamut de unos 50 mil años en las comunidades aledañas de la Presa Solís.
El hallazgo más importante ocurrió en mayo del 2009 cuando el señor Lorenzo Morales se encontraba escarbando en el patio de su casa ubicada en la colonia Marina Nacional de la comunidad de Nuevo Chupícuaro para realizar una letrina; en el lugar se localizaron los restos de defensa y cráneo de un mamut.
Diego Mondragón Briones, director del Museo Fray Bernardo Padilla, refirió que en 2009 se localizó a la orilla de la comunidad, en una casa humilde restos fósiles cuando se estaba excavando para hacer una letrina y como a los 3 metros 80 centímetros de profundidad el joven Lorenzo Morales se encontró algo distinto a la arena que estaba sacando, era algo parecido a una piedra grande por lo que la descubrió y extrajo un fragmento de lo que es una parte de la defensa de un mamut.
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Dijo que “luego de este descubrimiento se hizo una serie de trámites tanto en la delegación de esta comunidad como en el Gobierno Municipal y en el Instituto Nacional de Antropología e Historia hasta que logramos convencerlos de que nos enviaran un arqueólogo y hacer el rescate de los restos fósiles que se encontraban en este lugar”.
Agregó que “fue el arqueólogo Gerardo Rivera quien estuvo trabajando en este hallazgo en coordinación con personal del INAH, quienes en su momento dieron a conocer que estos restos fósiles podrían ser de un mamut o de un mastodonte de unos 50 mil años pero que se encontraban en un buen estado de conservación”.
Informó que luego de hacer el rescate de estos restos fósiles fue necesario contratar a un restaurador para hacer el ensamble de los restos y trasladarlos a los laboratorios centrales del INAH donde se hizo todo el proceso de restauración y la adecuación para que estos fósiles se pudieran exhibir y no se deterioren.
Indicó que el proceso de restauración y limpieza llevó más de un año y el área de protección que donaron los migrantes de esta comunidad, “estos restos de mamut fueron localizados de forma accidental, el cual están compuestos por un cráneo, un fragmento de defensa (colmillo) de 80 centímetros de largo por 20 de diámetro, en el lugar donde se encontraron se observaron dos capas estratigráficas, la primera de un metro 88 centímetros y la segunda de 2 metros con 10 centímetros donde se empezó a observar estos restos fósiles”.
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Resaltó que “en esta zona habitaban este tipo de animales, por lo que seguramente hay muchos más restos de mamut, luego de este descubrimiento despertó el interés de gente de otras comunidades que ya sabían del hallazgo de fósiles tanto en la comunidad del Maguey como en la comunidad de La Encarnación, afortunadamente estos restos fósiles fueron traídos al museo; una de estas piezas mide un metro de largo por unos 30 centímetros de ancho, mientras que la otra tuvo que ser desenterrada con tierra, ya que podría desintegrarse, en esta pueden notarse las capas de la tierra fácilmente”.
Declaró que también se tiene restos fósiles de vegetales, por lo que se requiere hacer estudios muy detallados para saber realmente de lo que son, “es una zona donde se pueden encontrar muchos restos fósiles, es un lugar donde se han fosilizados los huesos, los hallazgos del mamut y de otras partes de mamut u otra clase encontradas en las comunidades aledañas han sido del interés de investigadores y de las personas de la región; estos hallazgos son una gran ventana que nos permiten ver el pasado, invitamos a la gente a que conozca estos restos y que si siguen encontrando restos fósiles que los donen a los museos”.