CELAYA, Gto.- (OEM-Informex):- Deben los celayenses realizar una introspección profunda de la historia de su pueblo para determinar las fechas fundamentales que se deben celebrar en la ciudad, con el objetivo de conocernos mejor como sociedad; señaló el historiador José Antonio Álvarez, al impartir la conferencia “Las dos tradiciones de la fundación de Celaya” en la Casa de la Cultura.
“Es con el objetivo de que nos conozcamos mejor y que definamos de una vez por todas las fechas que son importantes para la ciudad”, aseveró el historiador, añadiendo que no se busca desdeñar la fecha del 12 de octubre de 1570, que fue cuando se emitió la cédula que significaba el mandato y facultad para fundar la Villa de Zalaya; mientras que el 1 de enero se fundó oficialmente la ciudad, de acuerdo con el ponente.
No obstante, dijo, es más importante conmemorar la fecha del 1 de enero de 1571, tal como lo planteó uno de los grandes estudiosos del tema, el historiador Rafael Zamarroni, quien se despojó de todos sus bienes para poder viajar y conocer más sobre la historia de Celaya, mediante el Archivo de Indias, donde vio el documento original de la fundación.
Expuso que otra fecha importante es cuando se constituyó como ciudad la Villa de Zalaya, en 1655, al igual que muchas otras fechas que no se conmemoran, pero que de igual forma deben ser importantes para todos los celayenses.
Sin apasionamientos y con la objetividad historiográfica del caso, los celayenses deben proceder a una introspección más profunda de su historia y determinar las fechas fundamentales de la ciudad, subrayó.
Por otra parte, expuso que la Presidencia Municipal debe de saber muchas cosas sobre nuestra historia, porque desgraciadamente ha habido algunas situaciones que se prestan para generar más confusión, como cuando el entonces presidente municipal solicitó que se declarara el año 1970 como el año de Celaya, cuando en realidad debió de ser 1971.
“Debe haber una amalgama y una confluencia de intereses con el principal objetivo de conocernos mejor”, planteó, añadiendo que también en el origen del nombre de Celaya ha habido muchas tergiversaciones, pues se ha establecido que es una palabra de origen vasco, por la ascendencia de los fundadores; sin embargo, no todos los fundadores tenían esa nacionalidad.
El nombre de Celaya inició como Nat Tha Hi, después Villa de Zalaya del Mezquital, posteriormente Villa de Nuestra Señora de la Purísima Concepción, Zelaya de la Purísima Concepción y Celaya, aunque también los caudillos de la Independencia a veces escribían el nombre con “S” o con “Z”; de ahí los constantes cambios que se han dado en el tiempo.