CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Las reliquias de San Chárbel estuvieron en la Diócesis de Celaya del 30 de abril al 2 de mayo, siendo las principales peticiones de los fieles: recuperar la paz, la salud, resolver los problemas cotidianos y, sobre todo, que quienes han sufrido a causa de la violencia encuentren consuelo; la peregrinación de las reliquias del santo libanés se lleva a cabo en toda la república mexicana con motivo al bicentenario de su natalicio a celebrarse en 2027 y los 50 años de su canonización a conmemorarse en 2028.
Las reliquias que se encuentran recorriendo el país por más de dos meses, pertenecen a los tres grados, es decir, las reliquias de primer grado son dos pequeños huesos de la rodilla, las reliquias de segundo grado son la estola que utilizó para la confesión y la capucha que es parte de su vestimenta de monje maronitas en el Líbano, mientras que la reliquia de tercer grado es el cinturón que fue tocado en su tumba.
Las reliquias llegaron el 30 de abril de la Diócesis de Querétaro a la Diócesis de Celaya arribando primero a la ciudad de Apaseo el Grande, justo en la entrada donde se encuentra el monumento a la Virgen de Guadalupe, con la intención de pedir por la paz y la reconciliación.
También fueron llevadas a la Casa del Migrante “El Buen Samaritano”, con el objetivo de pedir por todos los migrantes de México, Centroamérica, Suramérica y, finalmente, fueron trasladadas a la Casa del Buen Pastor, donde se quedaron toda la noche.
El 1 de mayo, las reliquias visitaron el asilo de la Casa de Reposo "La Residencia", con el propósito de pedir por los que sufren de soledad, la vejez y el abandono; posteriormente, fueron llevadas al Hospital Materno Infantil y después a la Parroquia de San Miguel Arcángel.
Posteriormente, fueron llevadas a la Catedral, donde el padre Rafael Patiño Ahumada, vicario de la Iglesia Catedral, informó que el objetivo de la visita fue hacer llegar la presencia de Dios a aquellos que están pasando por momentos de dificultad. Agradeció a todos los que hicieron posible el encuentro de la gente con las reliquias y dio gracia a las personas por la gran respuesta que tuvieron, ya que estuvo llena de fe y devoción.
También mencionó que, dentro de las actividades, se hizo el recibimiento de las reliquias, después se rezó la coronilla de la misericordia, el rosario por los enfermos, por las vocaciones, se hizo oración por los que sufren y se llevó a cabo la sagrada eucaristía presidida y concelebrada por el padre José de Jesús Palacios Torres, párroco de Catedral y el presbítero Jonathan Ángeles Valencia, encargado de la peregrinación.
Siendo este último quien en su mensaje informó que las reliquias de San Chárbel comenzaron su recorrido por el sur del país y el centro, por lo que, la Diócesis de Celaya es la diócesis número 25 que recorre, posteriormente, continuará con su peregrinar hacia el norte de la república mexicana.
Jonathan Valencia destacó que en este peregrinar han escuchado el clamor de la paz y la justicia. También se ha pedido la intercesión del santo por las familias que han sido víctimas y que han tenido pérdidas a causa de la violencia, por aquellas que sufren a causa de la enfermedad, por los problemas de la cotidianidad, entre otras cosas.
Exhortó a todos a unirse para pedir, de manera especial, “la paz que viene de Dios, la paz que debe nacer desde el corazón de cada uno, la paz que se requiere para las familias, para la sociedad y para el país”.
Posteriormente, el 2 de mayo, las reliquias salieron de la Catedral para dirigirse al Templo de San Agustín, con la finalidad de pedir por la expiación de quienes han caído, por la paz y la reconciliación de Celaya. También se rezó el rosario, se veneraron las reliquias y se llevó a cabo la eucaristía.
Al finalizar, las reliquias fueron trasladadas al Cereso, donde se celebró la misa con los reos, con el objetivo de pedir por su conversión y su liberación espiritual. Al concluir, las reliquias fueron trasladadas a la Diócesis de Irapuato.