CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Para la familia Esparza, oriundos del Estado de Hidalgo, es una libertad del espíritu que vuelvan a permitir las peregrinaciones, ya que el año pasado en que fueron prohibidas en casi todo el país, no pudieron visitar a la virgen de San Juan de los Lagos, pero ahora que nuevamente pasan por Celaya, consideran que es un milagro que poco a poco se acabe con la pandemia.
Reconocieron que es importante no bajar la guardia, y deben de usar cubrebocas dentro de una ciudad, pero también usan frecuentemente el gel antibacterial, no sólo para protección de la familia, sino por respeto a los celayenses y de toda persona de la ciudad que visitan.
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El señor Adán Esparza Peña, de 62 años de edad, comentó que tiene más de 30 años en la peregrinación, y sólo dejó de participar el año pasado, pero porque habían quedado prohibidas las peregrinaciones por la Covid.
Aseguran que han tenido, como familia, muchos milagros por parte de la virgen de San Juan de los Lagos, pero consideran que el mayor milagro es que se reduzcan los casos de contagios y muertes por Covid, y peregrinan para pedir que se acabe con la pesadilla de la pandemia.
También comentaron que es un milagro que, siendo pobres y de oficios modestos, viven al día con el poco dinero que ganan, pero siempre pasa que semanas antes de la peregrinación, hay buenas ventas en los productos del campo que venden, o de alguna o de otra manera les llega dinero honrado, decente que se utiliza para la peregrinación.
“Los milagros son muchos los que hemos recibido, y uno de ellos es cuando se enfermó muy grave mi esposa, y a punto estuvo de perder la vida, así que todos, unidos como familia, pedimos a la virgen de San Juan de los Lagos, y al aliviarse, se comprometieron en pagar la manda, pero pagamos la manda con una actitud positiva, unidos y alegres, como Dios manda”, expuso don Adán Esparza Peña.
