Inicia la XXXIII Asamblea Diocesana de Pastoral para fortalecer la sinodalidad

El encuentro busca evaluar el plan pastoral jubilar 2023-2024 y ajustar estrategias para una Iglesia misionera y sinodal

Ana Medina / El Sol del Bajío

  · martes 19 de noviembre de 2024

Sacerdotes, diáconos, vida consagrada, seminaristas y fieles laicos participan en la “XXXIII Asamblea Diocesana de Pastoral”. | Foto: Ana Medina / El Sol del Bajío

CELAYA,Gto.- Más de 300 personas, entre sacerdotes, diáconos, vida consagrada, seminaristas y fieles laicos participan en la “XXXIII Asamblea Diocesana de Pastoral”, donde se llevan a cabo diversos trabajos, reflexiones y oraciones, con la finalidad de identificar si las acciones y comportamientos de sus comunidades están alineados a los principios que deben guiar su vida cristiana y comunitaria, según las enseñanzas de la Iglesia.

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Los asistentes provenían de los decanatos de Sagrario Catedral, San Antonio, San Miguel, La Divina Providencia, Rincón de Tamayo, Apaseo el Grande, Comonfort, Dolores Hidalgo, Juventino Rosas, San Luis de la Paz y San Miguel Allende.

Durante la inauguración, el padre Israel Hernández Carmona, Vicario Episcopal de Pastoral, explicó que esta segunda fase de la asamblea tiene como objetivo “favorecer un ambiente de comunión y participación luego de la evaluación del periodo pastoral jubilar 2023-2024 y los reajustes al segundo plan diocesano de pastoral para que con una fuerte espiritualidad misionera en sinodalidad”.

Se llevan a cabo diversos trabajos, reflexiones y oraciones. | Foto: Ana Medina / El Sol del Bajío

Mencionó que el resultado final de este encuentro de escucha y diálogo será la suma de la reflexión profunda y la experiencia de todos los participantes, a quienes les pidió que no separen la evangelización de la misión, ya que ahí se encuentra la fuerza de su credibilidad. También dijo que es importante tener “una Iglesia creativa que sepa inventar espacios y generar servicios a todos, en especial, hacia los sencillos, descartados, a los que hemos olvidado”.

Por otro lado, durante su mensaje de bienvenida, Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, Obispo de la Diócesis de Celaya, se dirigió a los asistentes para que todos escuchen al Espíritu Santo para que los ilumine y guíe a conocer cuál es el camino que deben recorrer juntos.

Destacó que, de acuerdo con el Papa Francisco, el corazón de la sinodalidad es la escucha, el escuchar a los demás y, principalmente, al Espíritu Santo para discernir el camino a seguir en comunidad. Indicó que la sinodalidad, entendida como un itinerario espiritual, requiere de un encuentro con Cristo y un compartir la experiencia de este encuentro a los demás.

“Esta escucha del corazón compartida, garantiza el caminar juntos sinodalmente; de aquí la conversación en el espíritu, es decir, que bajemos a lo que a nuestro corazón motiva, lo que estoy viviendo, lo que me preocupa, lo que late en mi corazón y compartirlo a la luz del Espíritu Santo. Por eso la conversación del espíritu se convirtió en el corazón del sínodo, de ahí la importancia de distinguir y ver la relación entre Lectio Divina y la conversación en el espíritu”.

El resultado final de este encuentro de escucha y diálogo será la suma de la reflexión profunda y la experiencia de todos los participantes. | Foto: Ana Medina / El Sol del Bajío

“La actualización de los acuerdos y las decisiones pastorales surgidas de esta puesta en común, mediante las asambleas parroquiales, decanales, fortalecerán la articulación de las estructuras de parroquias, zonas y diócesis. Así se generarán, empezando desde la base, la parroquia, de abajo y no de forma piramidal, es decir, desde nuestros fieles; así se generarán los procesos comunes en la conducción pastoral que fortalecerá el caminar juntos como diócesis, y la provincia eclesiástica será la siguiente instancia”.

De igual forma, refirió que se necesita que cada comisión, dimensión, estructura diocesana, colegio de consultores, colegio de decanos, consejo presbiteral y curia de pastoral caminen juntos para que se pueda cumplir y nutrir el objetivo de la asamblea, así como las líneas de acción del segundo plan diocesano.

Para concluir, es importante mencionar que esta asamblea tiene como lema: “Iglesia Diocesana Sinodal y en Estado Permanente de Misión” y se lleva a cabo en las instalaciones del Colegio Marista.