CELAYA, Gto.- El próximo 5 de febrero cuatro seminaristas egresados del Seminario de la Inmaculada Concepción estarán recibiendo el orden del diaconado, anunció el padre Gilberto Rico Gómez, rector del Seminario Diocesano, quien puntualizó que en este ciclo escolar cuentan con una matrícula de 71 jóvenes, de los cuales 23 se encuentran en el seminario menor, 30 en el mayor y 18 en propedéutico.
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El sacerdote informó que la ordenación diaconal la realizará el Obispo de la Diócesis de Celaya, Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, en las instalaciones del Seminario Diocesano en punto de las 11:00 horas. También pidió a la comunidad católica su oración por los seminaristas y por las vocaciones “para que el Señor envíe obreros a sus mies”.
Por otra parte, los seminaristas egresados son: José Alfredo Marcial Zúñiga, José Guadalupe García Ramírez, José García Ruelas y Juan Pablo Ruiz Ortiz, coincidieron en sentirse muy contentos por recibir el regalo de Dios que es la ordenación. También platicaron un poco de ellos, así como su postura sobre algunos temas actuales.
Juan Pablo Ruiz Ortiz, contó que ingresó al seminario en 2015 en la etapa de curso introductorio, después realizó la etapa de filosofía y teología en el seminario diocesano de Celaya. Es originario de Mineral de pozos en San Luis de la Paz, previo al seminario, estudió una carrera de Técnico Superior Universitario. Actualmente, concluyó la etapa configuradora en el seminario.
José García Ruelas, es originario de Tepezalá, Aguascalientes. Llegó a Celaya en 2011, antes de realizar su proceso de formación vocacional hizo la carrera técnica en Urgencias Médicas, siendo voluntario en la Cruz Roja por dos años. Actualmente, concluyó la etapa de teología en el Seminario Diocesano de Celaya.
José Guadalupe García Ramírez, es originario de Valle de Santiago, su formación comenzó en 2014 en la etapa de curso introductorio, la etapa de filosofía y teología la realizó en el Seminario Diocesano de Irapuato. En 2022 se incorporó a la diócesis de Celaya en la parroquia de Mineral de Pozos. Actualmente, terminó el año de inserción.
José Alfredo Marcial Zúñiga, es originario de Celaya. Tiene una licenciatura en Administración de Empresas, al concluir la carrera decidió entrar al seminario en 2011. Actualmente, concluyó con la etapa en el seminario diocesano.
Ante la pregunta de por qué decidieron dedicar su vida a Dios, en lugar de formar una familia o dedicarse a cualquier otra cosa, Alfredo Marcial contestó que fue gracias al llamado que recibieron y, aunque aceptó que las distracciones y dificultades existen, es gracias a la voluntad de Dios que pueden continuar con el proceso y levantarse cuando se caen.
José García, mencionó que a ellos les tocó un periodo donde la familia se preocupó por educarlos con los valores humanos, sociales y religiosos, por lo que, es precisamente la familia quien tiene mucho que ver en su respuesta vocacional, ya que incluso les han dado el ejemplo con la fidelidad que han tenido sus padres en el matrimonio.
La clave, dijo, es que las familias “tengan o volvamos a ver lo fundamental en los valores humanos y cristianos preparándonos para ser hombres de servicio en la sociedad, en la Iglesia y en este caso hemos descubierto de a poco esa invitación de cristo y no ha sido fácil, es un proceso en el que el seminario nos va ofreciendo las herramientas, los elementos necesarios para dar una respuesta lo más posible concreta o como se exige en este llamado a ejercer la vida ministerial para la iglesia y toda la sociedad”.
Finalmente, ante la pregunta de cómo ayudarán a los jóvenes que se han sumergido en la confusión y la violencia, José García refirió que será acercándose a ellos. “Considero que por ahí puede ser un camino, acercarnos a los jóvenes no con un juicio o imposición, si no diciéndoles que me intereso por ti y vengo a presentarte a alguien que es Jesús de Nazaret a quien le importa tu vida, tus proyectos y de esta manera puedan ir ellos agregando en su proyecto de vida el evangelio y estos valores que propone el evangelio”.
