CELAYA, Gto.- La noche de este jueves la comunidad de San Miguel Octopan se vistió de fiesta y tradición con la llegada de la venerada imagen de Nuestra Señora de Zapopan.
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La advocación recibió el nombramiento honorífico de Generala del Ejército Trigarante desde el año 1821, con la consumación de la Independencia.
En el evento participaron autoridades municipales encabezadas por el presidente municipal Javier Mendoza Márquez, y se le entregaron las llaves de Celaya y de la comunidad, en un acto de fe y devoción.
El alcalde agradeció la visita de Fray Miguel Alonso Chávez, rector guardián de la Basílica de Zapopan y al delegado Félix Jacobo Maldonado Hernández por hacer posible esta celebración, y unir los corazones de quienes viven con fe.
La Virgen de Zapopan ya visitó San Miguel Octopan hace 5 años, durante su primera visita a la Diócesis de Celaya.
El origen de la devoción a la venerada imagen data del Siglo XVI durante el proceso evangelizador, cuando en el año de 1530, el padre franciscano Antonio de Segovia llegó al valle de Atemajac, llevando sobre su pecho una pequeña imagen de la Inmaculada Concepción.
La imagen había sido hecha por manos indígenas, junto al lago de Patzcuaro, según la técnica que los Purépechas empleaban, es decir, amasar la caña del maíz con miel de orquídeas, y con esa pasta hacer figuras. Se trata de una imagen pequeña, de unos treinta centímetros.
Nuestra Señora de Zapopan ha recibido muchas distinciones, también se la conoce como La Generala, La Reina y Madre de Jalisco, La Estrella de la Evangelización, entre otros.
Es la patrona de la Arquidiócesis de Guadalajara, y se le atribuye protección contra los rayos tempestades y epidemias, por lo que es muy visitada por los fieles en su santuario.
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