ACÁMBARO, Gto.- Desde hace más de 20 años, la acambarense Hortensia Jaramillo Chávez se dedica a la producción de nieve artesanal, un oficio que heredó de su papá Agustín Jaramillo.
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Refirió que desde que era una niña comenzó a ayudar a sus papás a elaborar nieve, quienes la vendían frente a la zapatería de los Alcántar.
Dijo que: “Mi negocio se llama Ricas Nieves Lolita, ya llevó varios años vendiendo nieves artesanales, este ofició lo heredé de mis padres Agustín Jaramillo y mi madre Clara Chávez, quienes también lo heredaron de mi bisabuela”.
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Agregó que “yo tenía seis años cuando empecé a ayudar a mis padres, aprendí todo sobre la nieve, a elaborarla con la paciencia y calidad que se requiere para endulzar el paladar de las personas, principalmente el de las niñas y niños”.
Indicó que “pese a que siempre ayudé a mis padres con la elaboración y venta de nieve, mi sueño fue siempre estudiar la licenciatura en educación preescolar, gracias al apoyo de mi familia lo logré, sin embargo, me di cuenta que mi felicidad estaba en seguir elaborando nieves y continuar con este bonito oficio”.
Señaló que desde el momento que comienza a elaborar los diferentes sabores encuentra un sentido a su trabajo y la motivan para ir mejorando “trato de hacer mi trabajo de la mejor manera, dedico el tiempo que sea necesario para que la nieve sea de calidad por ejemplo para hacer un sabor me llevo entre 40 y 60 minutos; todos los sabores son artesanales y lo más típico como vainilla, limón, mango, fresa, galleta, chocolate, guanábana y mamey”.
Resaltó que “yo vendo nieve desde 5 pesos, porque hay veces que la gente no tiene la posibilidad de comprar una nieve y luego si viene con muchos niños, entonces siempre me gusta pensar en la economía de las personas, pese a los incrementos de la materia prima”.
Finalmente, hizo una invitación a las personas para que acudan a comprar nieve todos los días de 11 de la mañana a las 4 de la tarde frente al Templo Expiatorio.