CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Como parte del décimo cuarto Foro Emergente Social y Cultural que organiza la Diócesis de Celaya en coordinación con el municipio e instituciones educativas, el licenciado en Filosofía egresado del Seminario Diocesano, Manuel Jesús Galván Moreno, impartió la conferencia A-marte y de vuelta, en donde invitó a estudiantes de nivel medio superior a reencontrarse a sí mismos para valorarse y después dar a los demás un signo de amor con madurez espiritual.
El maestro Galván Moreno, integrante de la Pastoral de la Cultura y de la Educación, ofreció una ponencia a estudiantes de la escuela preparatoria Justo Sierra, en donde explicó, inicialmente, el título A-marte e ir de vuelta.
Dijo que es como un viaje al exterior, pero la metáfora explica que es salir de uno mismo, de su tierra personal, para aventurarse a salir más allá de lo que le rodea, más allá, incluso de su casa, de la calle, de la colonia, y después encontrarse con el otro yo, con la persona de la que aprenderá para saber servir.
Retomando el tema central del 14avo Foro Emergente Social y Cultural, que en esta año planteó el tema “Crisis de amor”, expuso que no se puede amar a otra persona, si no se ama a uno mismo; por lo que para amar a otro, se tiene primero que amarse uno mismo, para así encontrar las singularidades que los hacen parecidos, y a partir de ahí, se puede dar el amor al otro.
Explicó que el amor no es un tema trivial, común, sino que amar es un don, una virtud singular, un milagro, pero habló de un amor maduro, un amor que fortalece el espíritu, que implica responsabilidad.
Amar con madurez es un viaje de encuentro con el otro, y a partir de eso se descubren muchas cosas de uno mismo, pero a la vez de los dos, y entonces, se vienen abajo muchos prejuicios, y se comprende a la otra personaManuel Jesús Galván Moreno
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Añadió a los estudiantes que el amor es una larga y difícil búsqueda, es una exploración, el amor es ir, salir de uno mismo para ser el otro, y al conocerlo, se comprende, pero además en el otro se redescubre uno mismo; así que se comprende al otro, pero también se comprende más a uno mismo.
Afirmó que cuando el amor sólo está en uno mismo, se vuelve una enfermedad del espíritu; cuando una persona sólo se cree amar a sí misma, se oscurece, se opaca su corazón, y entonces los sentimientos se amargan, se vuelve egoísta, oscuro, de malos sentimientos.
Expuso que la finalidad de la conferencia es que el joven aprenda a amar con responsabilidad, con madurez, para ayudar al otro, para servir al otro, y de esa manera, crear una sólida red de hombres que saben amarse unos a otros, pero con responsabilidad.
Para concluir, dijo que en el momento de que una persona sabe amar, se crea una mayor armonía de convivencia en el hogar, entre los familiares, con los amigos, entre vecinos, con la sociedad misma.