CELAYA, Gto.- Que lleguen más elementos del Ejército y de la Guardia Nacional a resguardar el municipio y el estado no preocupa tanto, “lo que preocupa es que no nos dicen cuántos se fueron. No sabemos si realmente están sumando o están equilibrando”, así externó su postura Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, Obispo de la Diócesis de Celaya, sobre la estrategia federal de traer más militares y Guardia Nacional para hacer patrullajes.
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El obispo reiteró que “nos dicen que llegan 500, pero no nos dicen cuántos se fueron, nos dicen que traen más, pero no nos dicen que ya retiraron a otros”, por lo tanto, se desconoce si quienes llegaron son el mismo número que se fue o si sumarán a los que ya estaban.
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Lo más importante, dijo, “es que participen activamente en la seguridad. Creo que no solo se trata de llegar, acordonar y dejar todo a la Fiscalía. El hecho de pasear y hacer rondines puede ser que inhiban un poco (la inseguridad) y den un poco de seguridad, pero también es verdad que algunas personas que he escuchado se han quejado de la mala atención por parte de la Guardia Nacional y que muchas veces en lugar de generarles confianza, generan desconfianza”.
“A veces ellos mismos son parte de esa situación que genera nerviosismo y conflicto a la gente. Eso tendrá que evaluarse, los gobiernos federal, estatal y municipal tendrán que hacer una evaluación para ver si realmente hay efectividad en ese tipo de estrategias”.
El obispo considera que es importante que se consulte a la ciudadanía, pero con una consulta real para conocer realmente cómo se siente la ciudadanía en ciertos lugares, ya que mucha gente ve que la criminalidad no va decreciendo, sino que va en aumento, por ejemplo, la extorsión y otro tipo de eventos”.
Desafortunadamente, puntualizó, en el municipio ya se han dado por lo menos dos casos de personas que empezaron a tomar justicia por su propia mano, “hemos visto dos o tres eventos en los que agarran a un extorsionador y les han dado un buen escarmiento”.
“Yo creo que es una invitación si la Guardia y los que deben procurar la seguridad no lo hacen están en su legítima defensa los pueblos de procurarse también seguridad y ellos organizarse para procurar resguardar sus vidas y su patrimonio”, finalizó Aguilar Ledesma.