CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- En el marco de las celebraciones por el 45 aniversario de la Diócesis de Celaya, la tarde de ayer el Nuncio Apostólico de México, Mons. Franco Coppola, ofreció una misa en el sitio donde se construye Mi Nueva Catedral, donde invitó a los fieles a no tener miedo ante la actual situación de violencia e inseguridad que se vive en el país, la cual dijo deriva de la impunidad, corrupción y desigualdad social.
Explicó que en México existe mucha impunidad y aunque actualmente está saliendo de un régimen opresor, no solo con el pueblo sino también con la Iglesia. Recordó que en su primer visita a México, hace 40 años,el Papa San Juan Pablo II tuvo que verse obligado a pagar una multa por ir vestido como Papa, pues la ley prohibía a los sacerdotes vestirse de tal forma, lo cual describió como una limitación a la libertad de culto.
En ese contexto, señaló que sigue existiendo una limitación hacia la Iglesia Católica respecto a la propiedad de medios de comunicación, lo cual dijo actualmente no tiene ningún sentido, debido a que la información no se puede encadenar y en la actualidad los medios son muy importantes para llevar el mensaje de la Iglesia a la gente.
Con el gobierno anterior la Iglesia Católica había negociado una ley para poner al día a las asociaciones religiosas; sin embargo, hace unos años la Constitución fue modificada y se insertó el principio de la libertad religiosa, pero no se corrigió la ley secundaria de Asociaciones Religiosas y Culto Público, por lo que se ha presentado un proyecto para que se enmiende esa situación.
Violencia e inseguridad
La actual situación de violencia e inseguridad que se vive actualmente en el estado, es producto del crecimiento de México a lo largo de los años; primeramente en cosas positivas, aunque también ha dado muchos pasos hacia atrás, expuso el Nuncio, añadiendo que el país es rico, y al mismo tiempo un país donde personas mueren de hambre debido a la extrema pobreza.
Hay una injusticia en la distribución de la riqueza, apuntó, agregando que México no es un país pobre y que en aquellos países pobres del continente africano, donde la mayor parte de la población es de escasos recursos, la pobreza se soporta más; sin embargo, en México la situación es diferente, pues hay gente que no tiene para comer y reaccionan de diferentes formas al ver que hay personas que hasta tiran la comida.
Expuso que en México hay mucha impunidad y corrupción, destacando a nivel mundial al alcanzar a registrar hasta un 97 por ciento en las encuestas realizadas sobre el tema por diferentes organismos internacionales, y el conjunto de esas problemáticas son la raíz de la violencia en el país, por lo cual no es una situación que pueda revertirse de un día a otro.
Manifestó que en días pasados el vicepresidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Mons. Carlos Garfias Merlos, fue invitado a la Cámara de Diputados donde se le presentó una estrategia de la Iglesia contra la violencia; por lo que ahora esperan que sean las autoridades las que tomen las decisiones adecuadas.
Comentó que el problema de la violencia no es exclusivo de México, sino que muchas naciones atraviesan por ese problema, el cual también ha derivado de la falta de la transmisión de valores de una generación a otra.
“Los padres de hoy en día no alcanzan a transmitir los valores a sus hijos, es como si hablaran idiomas diferentes, no se entienden”, subrayó, exponiendo que los adultos deben aprender a hablar y entender el idioma de los jóvenes, pues inclusive el Papa Francisco ha hecho la indicación de que se apoye y se invite a los jóvenes a la Iglesia, pues ésta necesita de sus energías.
No tener miedo
Algunas de las primeras palabras de Jesús Resucitado fueron “La paz esté con ustedes” y “no teman”, aseveró el Nuncio Apostólico, añadiendo que se trata de una invitación que marca todas las apariciones del Señor. La importancia de dichas palabras, continuó, toman fuerza al ser conscientes de todas las veces que cada una de las personas sienten una emoción de temor.
No obstante, Jesucristo venció a la muerte, lo cual hemos experimentado en nuestras vidas y por ello no hay razón para temer, pues en estos tiempos Jesús vive y se encuentra entre quienes más lo necesitan; mientras que la Iglesia sigue llevando el mensaje de fe y esperanza, el cual se ha mantenido al paso de los añosMons. Franco Coppola
Vivir la fe también fuera de la Iglesia
Por otra parte, señaló que el sacerdocio ha existido desde tiempos inmemoriales; sin embargo, en la actualidad los sacerdotes no siguen el siguen el ejemplo de Jesús, sino que actúan como sacerdotes del Antiguo Testamento, pues Jesús no recibía ofrendas ni vivía en el templo, sino que vivía por las calles anunciando el reino de Dios, no a quienes acudían a escucharlo, sino con quien se encontraba por la calle.
“Jesús no esperaba a que vinieran, Él iba”, enunció, añadiendo que a diferencia de los sacerdotes del Antiguo Testamento, Jesús no tomó ninguna ofrenda del pueblo, sino que se ofreció a sí mismo al pueblo poniendo su cuerpo en sacrificio.
Por tal motivo llamó a los sacerdotes a salir del templo, anunciando que se trata de una petición que ha hecho el Papa Francisco, para que salgan a las calles y lleven el mensaje al pueblo de que no debe de haber miedo, lo cual debe hacerse entre toda la comunidad, pues incluso el propio Jesús necesitó de la ayuda de discípulos y acompañantes.
Avances de Mi Nueva Catedral
Hace tres años fue la colocación de la primera piedra para la construcción de Mi Nueva Catedral; sin embargo, fue hace aproximadamente hace dos cuando se inició con la construcción de la Casa para sacerdotes cansados y enfermos, con la realización de estudios y el movimiento de las tierras para iniciar los trabajos.
A la par se comenzó a trabajar en la mecánica de suelos, para lo cual se hicieron estudios microsismicos de la zona, en el que se supo que se contaba con un suelo firme libre de fallas, dando como resultado unos cimientos con zapatas corridas.
Para la integración del conjunto hacia la zona del auditorio Tresguerras y a las tres etapas del Parque Xochipilli, se cuenta con el proyecto de utilizar la calle Parque del Bajío para continuarla y conectarla con avenida El Sauz, integrando una gran plaza, además, con el Museo de la Nave, ya que la Nueva Catedral además contará con áreas recreativas para laicos y religiosos.
La construcción sigue avanzando, pues la cimentación de la nave catedral, de las tres capillas y de la sacristía ha sido concluida prácticamente en su totalidad, por lo que el siguiente paso es la colocación de 16 marcos en forma de triángulo, que tendrán un su parte superior aproximadamente 34 metros de altura.