SAN MIGUEL DE ALLENDE, Gto. (OEM-Informex).- El fin de año para muchos no será pasarla feliz y en familia; mientras unos ya planean la cena y la noche para recibir el 2021, personas como Adriana González, oriunda de la comunidad Empalme Escobedo, municipio de Comonfort, tienen que viajar a otros municipios de Guanajuato, pidiendo apoyo económico para mantener con vida a su hija de 10 años, quien padece insuficiencia renal.
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Esta última semana del 2020, nos encontramos con Adriana González, solicitando apoyo económico por las calles del centro histórico de San Miguel de Allende, junto a otras dos personas que la acompañaban, una de ellas era su hija, quien se encuentra en silla de ruedas, pues el desgaste de la insuficiencia renal, impide que pueda desplazarse largas distancias, sobre todo ahora que junto a su madre se dedican a pedir apoyo económico por las calles de los diferentes municipios de Guanajuato, pues Adriana señaló que no le alcanza con su labor que realiza dos veces por semana, al hacer el aseo en casas donde la contratan.
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"Mil 268 pesos por hemodiálisis, que son dos veces por semana, más o menos 2,600 pesos, es lo que me gasto a la semana con el transporte del camino, para pagar las hemodiálisis de mi hija, que son los martes y los sábados. También me apoyo con mi esposo que trabaja de pintor o de albañil, él también le echa ganas". Narró Adriana.
La mujer, habitante de Comonfort, explicó que desde hace dos años inició con esta batalla contra la insuficiencia renal de su hija, a quien no se le desarrolló completamente uno de sus riñones, situación que a la fecha ya la ha llevado al tratamiento de hemodiálisis. La única esperanza que tienen es que pronto llegue un nuevo órgano que le pueda ser donado a la pequeña de 10 años, momento que se desconoce cuándo llegue, pues adelante de la hija de Adriana González, también hay otras personas que se encuentran esperando la misma oportunidad.
Con lágrimas rodando en las mejillas, la comonforense dijo: "Para año nuevo desde que nos pasó esto, realmente ni hacemos nada, preferimos hacer esto, salir a la calle y pedir apoyo a la gente, aparte muchos niños se están muriendo por la insuficiencia renal, es muy triste esta situación. Necesitamos un donador, pero mi esposo no puede porque es diabético y no sabemos cuándo sea eso, porque hay muchísimos en la lista de espera. Los doctores nos dicen que mi hija vivirá el tiempo que le hagamos las hemodiálisis y que se las hagamos bien, porque cuando no tenemos dinero se pone mal, entonces por eso pedimos dinero, porque a veces no nos alcanza".
