CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Los jóvenes son una de las principales preocupaciones que tiene la Diócesis de Celaya y, es que, a decir del Obispo de la Diócesis de Celaya, Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, actualmente son cada vez más los que están involucrados en situaciones de inseguridad, atentan contra su propia vida, han dejado a un lado su participación en actividades de voluntariado e incluso se han alejado de sus creencias religiosas por seguir modas o creer en las difamaciones que se promueven a través de las redes sociales y, a pesar de que el prelado considera que no todo está perdido, dijo que es importante que los padres de familia transmitan la fe y los valores a sus hijos.
Mencionó que en la actualidad “vemos una juventud de adolescentes perdidos en muchos campos, en muchas situaciones y, sobre todo, a nosotros nos preocupa más el hecho de cómo van aumentando y generándose los suicidios en jóvenes, en ciertos lugares va creciendo la cantidad de jóvenes que atentan contra su vida, algunos sí lo logran, otros quedó en el intento y se alcanzan a salvar, pero ahí está latente esa cultura de suicidio, de poco valorar la vida”.
También dijo, algunos jóvenes ya no tienen el valor del servicio, ya que han manifestado no estar interesados en hacer voluntariado en lugares como la Cruz Roja, Protección Civil, Bomberos, entre otros, por tal motivo, es que se ven personas mayores realizando esos servicios en favor de la sociedad.
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De igual forma, indicó que tampoco quieren involucrarse en las actividades de la Iglesia, de la vida social, cívica e incluso política, aclarando en el último punto que no se refiere a los partidos políticos, sino en el sentido amplio de política, es decir, en la participación de la construcción de la sociedad.
El obispo también aceptó que muchos jóvenes cada vez más están involucrados en situaciones de inseguridad y se han alejado de las creencias de la Iglesia Católica, debido a que considera, se dejan convencer por lo que se dice en las redes sociales, sin siquiera investigar si es una difamación o es contrario a la fe, tal y como pasa con la adoración a la Santa Muerte o Jesús Malverde, por nombrar algunos.
“Es un gran reto el que tenemos con la juventud, porque realmente están embebidos en las redes sociales y ahí tienen acceso a una cantidad enorme de grupos de ciertas sectillas que andan haciendo ciertos rituales, andan metidos en muchas cosas”.
“En las redes sociales ha habido una indiscriminada difamación, ataque y sobre explotación de ciertas deficiencias de la Iglesia, una situación que pasa en la Iglesia se magnifica, se viraliza, como si fuera lo último, porque el mal hace mucho ruido y el bien casi no, entonces, hay muchachillos que piensan que denigrar de la iglesia católica o salirse es como que está de moda”.
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Monseñor Aguilar Ledema, indicó que es importante reconocer que los padres de familia están fallando en la transmisión de la fe. Recordó que antes los padres de familia tenían como una de sus tareas primordiales educar en la fe y en los valores, sin embargo, ahora por motivos del trabajo, de ausencia del papá, de la mamá o que ésta última es madre soltera o que son generaciones que no vivieron la fe, es por lo que ahora no se transmite.
A pesar de todo, el obispo no pierde la esperanza de que los jóvenes regresen al buen camino y, es que dijo, en la Diócesis de Celaya se han tenido encuentros con la juventud perteneciente a los 11 decanatos, donde han participado cerca de 200 y 300, mismos que tendrán un encuentro con el Papa Francisco del 1 al 6 de agosto en Lisboa, Portugal, con motivo a la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ Lisboa 2023).
“Gracias a Dios hay signos de esperanza en muchos lugares con muchos jóvenes”, indicó el obispo, sin embargo, considera que aunque algunos jóvenes están integrándose a la Iglesia, “quisiéramos que fueran más, realmente son pocos, pero hay esperanza, hay signos de que no todo está perdido”, concluyó Monseñor Aguilar Ledesma.