Pese a estar cerrados, llegan a panteones

Algunas personas acudieron a visitar a sus difuntos, pero no se les permitió el acceso

Monserrat Maldonado | El Sol del Bajío

  · lunes 11 de mayo de 2020

Permanecieron cerrados | Foto: Adrián Mendoza | El Sol del Bajío.

CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- A pesar de que los panteones de la cabecera municipal, tanto públicos como privados, estuvieron cerrados este 10 de mayo, hubo algunas personas que hicieron acto de presencia al desconocer que no podrían ingresar al camposanto; mientras que afuera de uno de estos recintos se pudo observar también un puesto de venta de flores.



Un colaborador del panteón comentó que los retos a los que se enfrentaron este 10 de mayo fue la molestia de visitantes que quisieron ingresar al panteón a dejar flores o a pasarse un rato con sus familiares y conocidos.


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En un recorrido realizado por El Sol del Bajío tanto en panteones públicos y privados se pudo constatar que en el Panteón Norte se encontraron las puertas cerradas lo que desconcertó al señor José, quien después de 19 años interrumpidos de visitar la lápida de su madre este año no pudo hacerlo.

Por otro lado, en un recorrido que se hizo al panteón Sur se pudo observar a la señora Martina Nohemí Guerrero Romero quien se dedica a la venta de flores y acudió en espera de obtener ingresos, ya que hasta el momento tiene un 90 por ciento de disminución en las ventas de flores y que a 40 años de dedicarse a este giro a las afueras del panteón antes mencionado, la fecha del 10 de mayo siempre había sido una de los más esperadas del año.


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Relató que en años pasados se ha colocaba en un horario de 4 de la mañana a 10 de la noche por la afluencia de personas, pero el día de ayer se colocó a partir de las 8 de la de la mañana y sin que tuviera mucha venta.

Asimismo, al pasar por el panteón Jardines de la Paz ubicado en la avenida Lázaro Cárdenas se pudo constatar de que estaban las puertas cerradas al público con solamente una persona a las afueras de recinto.

La misma situación se observó en el panteón de Villas de la Esperanza el cual lució con sus puertas cerradas y con varias personas al exterior observando que no se tendría acceso.