Obispo clausura el Año Jubilar y preside la Misa Crismal en Celaya

En la celebración clausuró la Puerta Santa de Catedral

Ana Medina / El Sol del Bajío

  · jueves 28 de marzo de 2024

El Obispo clausuró la Puerta Santa de Catedral. | Foto: Alfonso Berber / El Sol del Bajío

CELAYA, Gto.- Acompañado del presbiterio diocesano, comunidad religiosa y fieles laicos, Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, Obispo de la Diócesis de Celaya concluyó el Año Jubilar y clausuró la Puerta Santa de Catedral. Posteriormente, se dirigió en procesión al Templo de San Francisco para presidir y concelebrar la Misa Crismal, en la cual consagró el óleo del crisma y bendijo el óleo para catecúmenos y de los enfermos.

➡️ Suscríbete a nuestra edición digital

La celebración realizada este miércoles comenzó con una Hora Santa realizada en la Catedral, donde los más de 200 sacerdotes diocesanos y 43 religiosos de los 11 municipios que conforman la Diócesis de Celaya realizaron oración y meditación. Al finalizar, se dirigieron a la puerta principal para ser testigos del momento en el que se clausuró la Puerta Santa y con ello se diera fin al Año Jubilar, en el cual los fieles pudieron ganar cada 18 de mes una indulgencia plenaria, esto con motivo a los 50 años de erección canónica de la diócesis.

Entérate aquí ➡ "La Eucaristía se integra: Nueva cofradía en la Procesión del Silencio 2024"

Después, se dirigieron en procesión hasta el Templo de San Francisco, donde se llevó a cabo la celebración de la Misa Crismal. Durante su mensaje, Monseñor Aguilar Ledesma exhortó a los sacerdotes a que pongan sus manos a disposición de Dios. “Pidámosle que nos vuelva a tomar siempre de la mano y nos siga guiando para que como diócesis sigamos caminando agradecidos en la fe”.


Se realizó una Hora Santa en Sagrario Catedral. | Foto: Alfonso Berber / El Sol del Bajío


Les pidió recordar que son enviados del Señor, que se deben a la obediencia y que tienen una misión importante dentro de la Iglesia y la sociedad. Mencionó que es un gran gozo y júbilo estar viviendo el 50 aniversario de la Diócesis de Celaya “con todos ustedes, sacerdotes, la vida consagrada y laicos”.


Monseñor Aguilar Ledesma preparó y consagró los santos óleos. | Foto: Alfonso Berber / El Sol del Bajío


“Todos los acontecimientos vividos, la apertura de la Puerta Santa, las indulgencias, la gran misión, la Memoria Agradecida, los signos de caridad, sobre todo, con los hermanos migrantes, la creación de dos Santuarios Diocesanos, las peregrinaciones, tantos momentos de gracia. Gracias a Jesús porque nos ha bendecido por toda clase de bienes espirituales y celestiales”. También les pidió recordar que “lo más extraordinario, es lo ordinario, pues es donde se mide la entrega del sacerdote. Por su generosidad a todos gracias”.



Al concluir su mensaje, los sacerdotes renovaron sus promesas sacerdotales hechas el día de su ordenación, mostraron su unión con el obispo a quien reconocieron como cabeza y pastor de la Iglesia. Tras la renovación de sus promesas se llevó en procesión los óleos al altar, donde el obispo los preparó. Después fue llevado el Santo Crisma.



El obispo bendijo el óleo de los enfermos, el óleo de los catecúmenos y consagró el Santo Crisma, los cuales son utilizados para la administración de cuatro sacramentos que son el bautismo, la confirmación, la ordenación de sacerdotes y obispo y la unción de los enfermos.

Infórmate aquí ➡ Monseñor Aguilar Ledesma:¿Un llamado a la equidad democrática para la Iglesia?

Es importante mencionar que, el crisma es elaborado con óleo, aromas y representa al Espíritu Santo.