ACÁMBARO, Gto. (OEM-Informex).- La senadora Antares Vázquez Alatorre, integrante de las comisiones de salud y derechos humanos, señaló que no se puede normalizar la violencia de género, esto durante su reciente visita al municipio de Acámbaro.
Explicó que las mujeres tienen el derecho a manifestarse siempre, al igual que todos, pero en específico porque los feminicidios siguen aumentando en el país.Antares Vázquez Alatorre
La violencia de género es parte de una cultura en la que todas las personas hemos crecido, violencia que asume que las mujeres son destinatarias de diferentes formas de violencia, la cual llega en algún momento hasta el feminicidio, así lo mencionó la legisladora.
Respecto a las manifestaciones feministas que se han registrado a nivel nacional, dijo que la marcha en la Ciudad de México fue infiltrada por el grupo "Los Claudios" que ya ha sido identificado como un grupo de choque que ha servido tradicionalmente al Partido Revolucionario Democrático (PRD) y que se encargaron de manchar la protesta feminista.
"Hay un reportero al que haciendo su trabajo llegó otro hombre y lo golpeó, y fueron los que hicieron los destrozos, está documentado ya se está haciendo la investigación y es muy grave porque se pretende con esto criminalizar otra vez la causa feminista que es una causa pacífica", dijo.
Antares Vázquez explicó que las mujeres tienen el derecho a manifestarse siempre, al igual que todos, pero en específico porque los feminicidios siguen aumentando en el país; "porque esta cultura que permite o que propicia que a la mujer se le ataque con bastante facilidad pues tiene que ir acabando y tenemos que alzar la voz todas para que se visibilice esta lucha".
En cuanto a la alerta de violencia de género, dijo que no sólo faltan las alertas de género, que son un tema legal, sino que hace falta educación sobre nuevas masculinidades, la deconstrucción de la masculinidad centrada en que el hombre tiene que ejercer cierto tipo de violencia o denota debilidad, esto además de que las mujeres sepan distinguir cuando están siendo violentadas, pues se ha normalizado tanto la violencia que no notan cuando son violentadas.