Más de un centenar de mujeres inician la peregrinación femenil a pie al Tepeyac

Con misa de envío y bendición, las peregrinas ofrecen su viaje como un acto de penitencia y conversión espiritual

Ana Medina / El Sol del Bajío

  · jueves 1 de agosto de 2024

Más de un centenar de peregrinas participaron en la misa. | Foto: Cortesía | Diócesis de Celaya

CELAYA,Gto.- Más de un centenar de mujeres que integran la Peregrinación Femenil a Pie al Tepeyac, se dieron cita en Sagrario Catedral para participar en la misa de envío hacia la Basílica de Guadalupe, la cual estuvo concelebrada y presidida por el Obispo de la Diócesis de Celaya, Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, quien las invitó a que su peregrinar se convierta en una experiencia espiritual-eclesial y, a que ofrezcan a Dios, como un acto de penitencia saludable, su cansancio, el sueño, la lluvia, los sufrimientos y las contrariedades que puedan encontrar en el camino.

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En punto de las 05:00 horas, las peregrinas se formaron a la entrada de la Catedral para recibir la bendición de Dios, a través del obispo. Posteriormente, participaron en la misa y cantaron alabanzas junto con el mariachi que se dio cita en la parroquia.

El obispo recibió a las peregrinas en la entrada de Catedral. | Foto: Cortesía | Diócesis de Celaya

Durante la homilía, el obispo les manifestó que “esta peregrinación no es para hacer deporte, no es una competencia, es una experiencia espiritual-eclesial”, por lo que, “al peregrinar deben ser mejores, esta experiencia debe ayudarles en su proceso de conversión”.

“Si llegaron con poca cizaña como dice la escritura, al final de la peregrinación deben estar convertidas en trigo. Al finalizar, no sean las mismas que salieron, que esta experiencia espiritual les ayude a convertirse, a ser mejores católicas y sean ese trigo agradable y profundo que se pueda ofrecer en cada eucaristía”.

Monseñor Aguilar Ledesma presidió la misa. | Foto: Cortesía | Diócesis de Celaya

El obispo las invitó a que en esta experiencia del peregrinar ofrezcan a Dios su cansancio, el sueño, la lluvia que también cansa, los sufrimientos y todas las contrariedades que puedan pasar durante el camino, como un acto de penitencia saludable por sus pecados. Además, les pidió que se dirijan a la Virgen de Guadalupe para que “nos auxilie, nos cuide y nos proteja”.

Al finalizar la misa, el centenar de peregrinas, junto al mariachi, cantaron “La Guadalupana” mientras se dirigían a la Calzada Independencia para comenzar su recorrido, el cual siguió por la calle Morelos, el Boulevard Adolfo López Mateos hasta la salida de los Apaseos para continuar su camino a la Basílica de Guadalupe.

Se tiene contemplado que la llegada a la Basílica sea el jueves 8 de agosto, donde participarán en la misa de 06:00 horas que estará concelebrada por el obispo de la Diócesis de Celaya. Por otra parte, es importante mencionar que las peregrinas compartieron tres formas de celebrar a la Virgen de Guadalupe y son: “realizar una peregrinación espiritual rezando el Santo Rosario, esforzarse por aplicar las enseñanzas del Rosario en la vida diaria y, ofrecer las buenas acciones, actitudes y sentimientos a la Virgen”.