CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Aunque dejará que sea Dios quien juzgue los actos de cada persona, la señora Karen Razo, madre del menor Emilio, quien fue asesinado a puñaladas por otro menor, buscará que se respete la ley y que se haga justicia; luego de que se diera a conocer que el presunto atacante fue puesto en libertad mientras continúa su proceso penal.
Al considerar injusto el hecho de que hayan puesto en libertad al joven que apuñaló a su hijo, dijo ser consciente de que en ocasiones los jóvenes se comportan de una manera en su casa y de otra muy diferente en la calle, pero a pesar de ello dijo conocer bien a sus hijos.
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Mencionó que Emilio era un joven noble al que tendrían que haberle hecho algo muy grave para que reaccionara a la defensiva o para arreglar las cosas y que el error que cometió su hijo fue intentar arreglar un asunto con una persona llena de maldad y cobardía, quien al no poder defenderse “a mano limpia”, tuvo que valerse de un arma blanca para atacarle.
Como cualquier joven en la etapa de la adolescencia, que atraviesa por diferentes cambios en su crecimiento, Emilio era una persona que en ocasiones tenía algunos choques con su familia, como el no querer hacer un mandado o situaciones por el estilo, pero no se distinguía por meterse en problemas innecesariamente, según describió su madre.
Señaló que algunas personas comentaron que su hijo le hacía bullying al otro joven; sin embargo, según mención, Emilio iba en el turno de la tarde en la secundaria Las Batallas de Celaya; mientras que el joven acusado acudía a clases por la mañana, por lo que no hay lugar para dichas delaciones.
La señora Razo dijo ser cristiana, por lo que dejará que Dios sea quien juzgue los actos de quien arrebató la vida a su hijo, aunque aclaró que denunció los hechos ante el Ministerio Público para que se haga justicia, pues su responsabilidad como ciudadana es acatar la ley y que ésta se aplique como debe de ser.
Lo justo, dijo, es que el presunto responsable de la muerte de su hijo lleve su proceso penal tras las rejas, pues al estar en libertad otros jóvenes corren el riesgo de ser víctimas, ya que se trata de una persona cobarde que no se toca el corazón para matar a una persona, lo cual ya quedó demostrado, manifestó.
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“Yo busco que otra familia no sufra lo que nosotros estamos sufriendo con la pérdida de un ser querido”, expuso la dolorida madre, quien considera que Derechos Humanos protege mucho a los niños y jóvenes, aunque haya jóvenes que no valoren lo que es la vida y a quienes no se les aplica la ley como debe ser.
Finalmente, señaló que buscará que al presunto asesino se le aplique todo el peso de la ley, para lo cual ya se asesora legalmente, pues además cuenta con una familia que la apoya y que está dispuesta a hacer lo que sea necesario para que se haga justicia y se respete la ley.
Cabe recordar que fue la tarde del jueves 14 de febrero cuando se reportó a central de emergencias 9-1-1 una riña entre estudiantes de la secundaria Batallas de Celaya, en la que uno de los involucrados resultó lesionado tras ser atacado con un arma blanca; minutos más tarde se reportó el fallecimiento del joven Emilio N., de 13 años de edad.
El presunto responsable, Jaime N., fue detenido por la Policía Municipal al igual que su padre, quien intentó ayudarlo a escapar; sin embargo, desde el pasado lunes trascendió que el menor fue puesto en libertad, ya que únicamente se le acusó por participar en una riña.
