CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Al darse a conocer que los familiares de los policías desaparecidos podrán reclamar su finiquito y el pago de los días laborados hasta antes de su desaparición, María del Carmen Vázquez, mamá del Policía Auxiliar, Alejandro Peña Vázquez, quien fue secuestrado el 22 de septiembre de 2019, indicó que el dinero no es lo importante para ella, ya que “lo único que quiero es que encuentren a mi hijo”.
Carmen Vázquez comentó que pertenece al colectivo de Búsqueda Luz y Justicia, pero debido a que la presidente se encuentra resguardada en su casa porque se contagió de Covid-19, no han tenido acercamiento con las autoridades y por lo tanto dijo que “no sabía que podía reclamar el finiquito y el pago de los días que trabajó mi niño antes de desaparecer”.
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“A mí no me han notificado nada de esto, es más nadie se me ha acercado para ver si necesito algo o para traerme noticias de su paradero, pero no sé qué pensar con esto del dinero, porque si así les está valiendo, no nos están apoyando”.
“Siento que al darnos esos recursos es para deslindarse, para lavarse las manos, siento que menos nos van a apoyar. Él trabajaba para el gobierno y desde un principio se ve que a ellos no les importa, lo ven como un policía más, uno menos y no se trata de eso, deben tener interés y preocupación por todos ellos”.
Refirió que, por otra parte, el dinero le serviría para los gastos de su nieto de tres años, el cual es hijo de Alejandro Peña, sin embargo, destacó que “para mí lo más importante es mi niño, lo único que quiero es que encuentren a mi hijo, que se sepa de él y que se haga justicia, el dinero no es importante, yo lo quiero a él, porque es mi apoyo y mi vida entera”.
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También recordó que por la desaparición de su hijo ya hay un detenido, pero hasta el momento no ha dado información sobre el paradero de Alejandro, por ello solicita a las autoridades que pongan atención a eso y que logren que “esta persona hable de una vez y me diga en dónde está”.
De igual forma, mencionó que desde hace dos años cuenta con el acta de ausencia, la cual tramitó ante la Fiscalía, e indicó que, aunque no recuerda el costo exacto, en ese tiempo no pasaba de 200 pesos.