CELAYA, Gto.- En estos tiempos en que en todas partes del mundo parece que la amargura, la violencia y las guerras no van a desaparecer, el padre José de Jesús Palacios Torres, Vocero de la Diócesis de Celaya, recuerda a los fieles que la Navidad, la cual está a punto de llegar, debe llevar a las personas a la alegría, por tal motivo, hace un llamado a que no pierdan la esperanza, a que adornen su interior con las virtudes cristianas y humanas para recibir a Cristo en su corazón y, con ello, ser testigos de la luz y promotores de la paz que tanto necesitan los pueblos.
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Palacios Torres mencionó que mucha gente que no es partícipe a la religión católica o no son cercanos, sino solo bautizados, no han escuchado sobre la palabra Adviento y su significado, por lo que, considera que los católicos que sí van a misa son privilegiados, ya que conocer el significado de esta palabra los ayuda a tener esperanza.
La nota aquí ➡ Adviento: Tiempo de preparación para la Navidad
“La palabra adviento es una oportunidad, una dicha que tenemos los cristianos católicos. El adviento es un tiempo en que la Iglesia ofrece en razón a una preparación para el nacimiento de Jesús”. Mencionó que así como las ciudades se van revistiendo de luces, esferas y de adornos para verse bonitas, así debe adornarse y reflejarse en el interior de cada persona para que puedan introducirse en un tiempo de alegría, a fin de dejar a un lado la desolación.
“El Adviento es el tiempo de la alegría, es algo importante, por ejemplo, imaginémonos que alguien de nosotros tiene una persona muy estimada, muy querida y que de repente nos habla por teléfono y nos dice voy a ir a tu casa en marzo, desde el momento en que nos avisa que viene ya nos da alegría y no solo nos da alegría, sino que nos hace pensar cómo prepararnos para ese día que va a venir”.
“Cambiar el colchón, las sábanas, pintar la habitación donde vamos a hospedarlos, nos lleva a preparar su venida. El tiempo de adviento es un tiempo de espera de la venida de Jesús, pero también de preparar a aquel a quien esperamos, de preparar lo que esperamos”.
Mencionó que es importante que las personas se preparen para este gran acontecimiento, no solo moviendo las salas o el cuadro para poner el árbol de Navidad, sino moviendo aquellos que impide que Cristo, quien es el que da la paz, entre y habite en el corazón.
“En todas las casas seguramente se ha puesto el árbol de navidad, se ha adornado con luces, esferas, con escarcha y más, igual el pesebre se estará haciendo con estas mismas dinámicas, porque queremos adornar para el nacimiento de Jesús. Que en nuestro corazón nos sea diferente, que no solo abramos el espacio para que Cristo entre, sino que, además lo adornemos con las virtudes cristianas, con las virtudes humanas que justamente, por un lado, nos ayudan a adornar el corazón y, por otro lado, nos ayudan a hacer testigos de la luz”.
“Porque Él es la luz verdadera, no nos entretengamos en esta navidad con las lucecitas, sino que esperemos y preparemos la luz verdadera que es Cristo y que seamos nosotros testigos de ella. Revestidos de las virtudes humanas y cristianas, podremos adornar el corazón para que Cristo nazca en él”, concluyó el sacerdote.