CELAYA,Gto.- Originario del Pueblo Mágico de Comonfort en Guanajuato, J. Félix Godínez Paloblanco, maestro en cestería de carrizo, ha dedicado 60 años de su vida a este oficio artesanal, el cual aprendió de sus abuelos y bisabuelos desde que tenía cinco años. Actualmente, a sus 65 años de edad, se ha convertido en un referente de la artesanía local y su catálogo abarca más de 300 diseños diferentes, adaptándose a las necesidades de sus clientes, ya sea para adornar un evento especial o para ofrecer productos únicos y funcionales.
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Félix Godínez platicó que desde muy pequeño le nació el amor por esta artesanía, por tal motivo, decidió dedicarse a ello y, aunque sus hermanos no comparten la pasión por este arte, ha transmitido el conocimiento a su hijo, quien, a pesar de querer seguir otro camino profesional, también aprecia y aprende el oficio. Agregó que “la enseñanza que le doy va más allá de la técnica, incluye también el arte de la venta y mi hijo se destaca bastante en ella”.
El artesano refirió que, tras participar en un evento en Soria, fue invitado a Celaya para participar en el “Merequetengue, fiesta y tradición”, organizado y llevado a cabo por el coordinador de Casa del Diezmo, Néstor Desales Correa. Ante esto, dijo sentirse muy honrado por ser tomado en cuenta para ofrecer y mostrar cómo se elabora la cestería de carrizo en esta ciudad.
Recientemente, dijo: “he diversificado mi oferta, incluyendo la personalización de botellas de vino y artículos relacionados con el mezcal, trabajando con el Viñedo San Miguel y una empresa local de mezcal ubicada en mi natal Comonfort”.
Entre sus creaciones más destacadas se encuentran canastas para colocar un árbol de navidad pequeño, arreglos florales, pantallas para focos, jardineras, botes lecheros, floreros, jarrones, canastas para vender tacos sudados o pan e incluso realiza centros de mesa para bodas, XV años y todo lo que el cliente le solicite.
Estas piezas van desde los 35 pesos hasta los mil 500 pesos, sin embargo, “me adapto a los diferentes presupuestos y preferencias”, agregó que, lo que más se lleva la gente es la canasta para arreglos florales de todos los tamaños.
Sobre el proceso de elaboración, explicó que cada pieza la realiza de manera meticulosa y con técnica. “La cestería comienza con la recolección y el pelado del carrizo, seguido de la elaboración de las tramas y el tejido. Dependiendo del tamaño y tipo del canasto solicitado, elijo el grosor adecuado del carrizo para asegurar la calidad del producto final”.
“Por ejemplo, los canastos grandes requieren carrizo grueso, mientras que los más pequeños utilizan carrizo delgado. La dedicación y el tiempo necesarios para completar cada pieza varían, algunos canastos los tengo listos en tan solo 12 minutos y otros pueden tomar hasta un día entero, todo tiene su tiempo”.
Godínez Paloblanco mencionó que su compromiso con la calidad se ve reflejado en cada pieza que crea y, es que, “no solo me enfoco en la estética, sino en la durabilidad y funcionalidad de mis artesanías. Durante estos 60 años que he dedicado mi vida a elaborar cestería de carrizo, he mantenido un historial de satisfacción del cliente, es decir, no he tenido ningún rechazo, ni reclamo”.
Para concluir, informó que aquellos interesados en adquirir una pieza para un evento especial o para adornar su casa u oficina pueden contactarlo a través de la Dirección de Turismo en Comonfort, quienes facilitan el enlace entre él y los clientes interesados.
