CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- El obispo de la diócesis de Celaya, Benjamín Castillo Plascencia, invitó a la sociedad a realizar un ejercicio de autocrítica, porque el problema de la inseguridad, no es asunto sólo de la autoridad, nace en la sociedad y en la misma familia.

Asimismo, pidió a los manifestantes que la sociedad misma sea consciente con las marchas porque todos están involucrados, que la violencia nace en la sociedad y en la misma familia, y espera que los mismos que marchan, la ciudadanía y las autoridades en general, que no lo hagan de una manera crítica, sin antes verse ellos mismos primero.

Benjamín Castillo Plascencia

Es bueno que vengan 600 y más elementos federales a apoyar en la seguridad del municipio, porque es un momento coyuntural, pero no es la solución: “necesitamos nosotros ser más pacíficos en general, comenzar por difundir los valores, como la honestidad, buscar ser más laboriosos, formar a los muchachos para que trabajen y sigan la vida de una manera honesta”.

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Es importante que no sólo se culpe al gobierno y, en este caso a la alcaldesa, como si fuera la omnipotente, ella por su parte, hará lo que le corresponde, pero sin el apoyo de la ciudadanía no se obtendrán buenos resultados.

Las marchas que se han manifestado en la ciudad en contra de la violencia e inseguridad han sido de mayor importancia; sin embargo, no siempre se trata de echar culpas, como sociedad, se debe hacer una autocrítica y ver el reflejo de lo que como ciudadanía se aporta y darse cuenta qué nos toca a todos.

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Antiguamente se daba mucho el robar al tren, familias enteras sacaban a los niños de la escuela para robarse el maíz, “trabajar” en lo que les enseñaban, pero esa es la forma de mal educar, es muy importante formar a la persona, se puede formar mal una mala educación, que es enseñar cosas malas.