Fervor y fe: Peregrinos del Bajío recorren 10 días hacia el Tepeyac

La peregrinación de Guadalupanos de a Pie del Bajío al Tepeyac de la Diócesis de Celaya, compartió su fervor por la Morenita del Tepeyac

Ana Medina / El Sol del Bajío

  · lunes 14 de octubre de 2024

Los peregrinos se enfrentaron a la lluvia, el frío, al cansancio y a malestares de salud. | Foto: Cortesía / Guadalupe Guillén

CELAYA, Gto.- Para los peregrinos, su caminar lleno de fe y devoción implica profundizar su experiencia espiritual. Durante 10 días, la peregrinación de Guadalupanos de a Pie del Bajío al Tepeyac de la Diócesis de Celaya, compartió su fervor por la Morenita del Tepeyac y ofrecieron a la madre de Dios todas sus dificultades y, es que, de acuerdo con el peregrino Guadalupe Guillén, se enfrentaron a la lluvia, el frío, al cansancio, a malestares estomacales, gripes y ampollas que, en lugar de desanimarlos, los ayudaron a continuar con su camino.

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Todo comenzó el 1 de octubre a las 5:00 horas cuando cerca de 500 peregrinos de Celaya participaron junto a sus familias en la misa concelebrada y presidida por Monseñor Aguilar Ledesma, Obispo de la Diócesis de Celaya, quien los exhortó a ofrecer a Dios las contrariedades que surgieran en el camino y a llevar el Evangelio con sus palabras y acciones a todas aquellas personas que conocieran en los diferentes poblados a los que llegaran.

Al salir, comenzaron su caminar hacia la Basílica de Guadalupe y en el trébol de los Apaseos se unieron al resto de los peregrinos pertenecientes a la Diócesis de Celaya. Durante el segundo día, el padre Eloy Padrón, capellán de los peregrinos, celebró la misa, posteriormente se quedaron en Cebolletas, Coroneo y en la siguiente quedada en el Pueblo Mágico de Amealco.


Juan Pablo Ramírez, Kike Ortega y Gilbert, participaron por primera vez en la peregrinación. | Foto: Cortesía / Guadalupe Guillén



Platicó que, entre los peregrinos se destacó la participación del grupo de Neutla, ya que fomentaron la devoción a Santa María de Guadalupe entre los niños, asegurando la continuidad de esta hermosa tradición en el futuro. También celebraron que Juan Pablo Ramírez, Kike Ortega y Gilbert “El Fierro”, participarán por primera vez en la peregrinación.


Chucho Bravo cumplió 50 años de peregrinar. | Foto: Cortesía / Guadalupe Guillén


La familia Jiménez Serrano, por tradición, ofreció el almuerzo a los peregrinos provenientes de Rincón de Tamayo, mientras que la familia Martínez brindó alimentos en la zona de los Picapiedra, Aculco, tal y como lo ha venido haciendo los últimos diez años.


A pesar de las ampollas y las contrariedades los peregrinos continuaron con su camino con fe. | Foto: Cortesía / Guadalupe Guillén


Por su parte, la familia Fragoso Patiño también se sumó a esta generosidad, proporcionando comida en San Martín, Aculco, a quienes descansaban del camino. Además, la familia Jiménez, originaria de Celaya también ofreció alimentos a los peregrinos de Tenería y de San Elías, tal y como lo ha realizado durante los últimos cuatro años.

Otro evento importante que destacó fue que el hermano Chucho Bravo, de Apaseo el Grande, cumplió 50 años de peregrinar, ante esto, compartió sus vivencias llenas de fe y devoción hacia Santa María de Guadalupe.

Precisó que el 6 de octubre, los peregrinos llegaron a Santa Elena Chapa de Mota, donde, a pesar de una intensa lluvia, celebraron la misa. En el día 8 de octubre, disfrutaron de un almuerzo en Cahuacán, en el Estado de México, continuando a pesar de los inconvenientes de salud y las contrariedades.

Para el 9 de octubre, a las 5:30 horas, los peregrinos llegaron a Tlalnepantla de Baz, donde celebraron una misa antes de descansar para la última jornada, la cual comenzó el 10 de octubre, a las 5:00 horas al llegar a la Basílica de Guadalupe, donde visitaron la imagen de la Morenita del Tepeyac plasmada en la tilma de San Juan Diego y participando en la misa de las 6:30 horas concelebrada y presidida por el Monseñor Aguilar Ledesma. Al finalizar, desayunaron y emprendieron el regreso a sus hogares, cerrando así su peregrinación.

Cabe mencionar que, de acuerdo con Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, Obispo de la Diócesis de Celaya, entre peregrinos a pie, en bicicleta, Antorchistas, los que se fueron por sus propios medios, más los familiares, casi 20 mil personas estuvieron este 10 de octubre en la Basílica de Guadalupe participando en la misa y siendo testigos de la firma del documento de fundación del Instituto Celayense de Estudios Guadalupanos (ICEG).