CELAYA, Gto.- De las aproximadamente 60 mujeres que participan en los encuentros Pre-Vida que organizan las religiosas, cerca de 10 son las que deciden dar el sí al llamado a la vida consagrada, por lo que, a la Iglesia Católica aún le falta hacer “más promoción vocacional”, mencionó Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, Obispo de la Diócesis de Celaya.
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El obispo mencionó, por una parte, que afortunadamente las vocaciones sacerdotales se han estabilizado, “hubo una etapa que fue en decrecimiento, pero ahorita ya se estabilizó. Ahorita queremos mejorar a través de la promoción vocacional para incorporar a más jóvenes, entusiasmarlos y descubrir en ellos la vocación a la vida sacerdotal”.
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Sin embargo, refirió que en la vida religiosa cuesta más trabajo y, es que, aunque se realizan encuentros de Pre-Vida dirigidos a las jóvenes que tienen inquietud por la vida religiosa, son pocas las que deciden entregar su vida a Dios.
En el último que se tuvo, dijo, “estuvieron alrededor de 60 mujeres pertenecientes a la zona norte. Ahí se les mostró y se les manifestó el abanico de expresiones religiosas que hay, porque existen diferentes carismas como la Vida Contemplativa, que son las que están en los monasterios y la Vida Activa, que son las que realizan actividades en las escuelas, también son enfermeras, catequistas, entre otras formas que se tienen de vivir la vida religiosa”.
Refirió que, por ejemplo, de las 50 o 60 mujeres jóvenes que acuden a los encuentros, cerca de 10 tienen la intención de comenzar con su formación para pertenecer a la vida religiosa. De esas, cada una va direccionando su carisma, es decir, decide si se consagra para pertenecer a la vida contemplativa o activa.
Ante esta situación, Monseñor Aguilar Ledesma indicó que “en promedio son muy pocas las mujeres que deciden ser religiosas. Realmente nos hace falta hacer más promoción en la Pre-Vida religiosa”, concluyó.
