CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- A pesar de que el ISSSTE ha establecido un nuevo sistema para la entrega de medicamentos, y ahora los derechohabientes toman un número y esperan sentados, todavía hay gente que se ha manifestado molesta porque la tardanza es la misma, hasta más de cuatro horas para recibir el medicamento.
Al respecto, Guillermo Caballero Mendoza, jefe de la Unidad de Atención al Derechohabiente y Comunicación Social de la Delegación del ISSSTE en Guanajuato, expuso que el área de la farmacia sufre un proceso de regulación, a través de un sistema, para evitar el desabasto de medicamentos, y evitar posibles robos o desvíos de éstos.
Se está capturando a través de un programa llamado Simec, que antes no se hacía y el derechohabiente llegaba con su receta y se le surtía, sin que la persona a cargo de la farmacia revisara bien los datos; pero ahora se revisan todos los datos, por ejemplo, si el paciente llega a solicitar 30 pastillas que un tratamiento de un mes, pero si está a mediados de mes, significa que todavía tiene 15 pastillas, por lo que no se le surteGuillermo Caballero Mendoza
Explicó que si la persona argumenta que quiere tener de reserva, se le explica que no se debe tener almacenada en casa, porque puede caducar, o hay otras personas que están necesitando dicho medicamento que otros quieren llevar de más.
Enfatizó que esa es la razón por lo que está en proceso de acomodo, con el fin de evitar que la gente tenga duplicidad de medicamentos, “evitar que en un momento dado alguien esté sacando 25 cajas de 30 pastillas. ¿Para qué las quiere? Para revenderlas o hacer mal uso de ellas”.
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Aclaró que ahora se está perfeccionando el sistema, y mediante un código de barras se captura el nombre del paciente, y se meten las claves, de tal forma que cuando llega el paciente, se pasa la hoja por la barra, y salen los datos si el paciente requiere o no el medicamento.
Agregó que además del código de barras, se puso un reloj que señala el turno que una persona entrega previamente para que después pueda tomar asiento.
Además de la persona que entrega los números o turnos, hay otra persona que pasa con cada una de las personas sentadas para preguntar qué tipo de medicamento necesita, y si lo hay, se le solicita que espere; pero si no está surtido el medicamento, se le informa la fecha que podría estar, a fin de que no esté esperando.
Añadió que era comprensible que había personas que hacían fila o esperaban horas, y cuando les tocaba su turno y le decía que no se contaba con el medicamento, se molestaban y hasta insultaban a la persona.
Pero ahora, con los nuevos sistemas de atención, en donde una persona pasa a ver a cada uno de los derechohabientes para informarle con tiempo si se cuenta o no con el medicamento, se reducen tiempos.