CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Pese a que en el Mercado de Abastos y en el Mercado Hidalgo la mayoría de los precios han bajado; en el supermercado algunos precios continúan elevados.
El señor Salvador Maldonado de la Central de abastos mencionó que los productos los traen del norte del país porque haya tienen un clima cálido en los tiempos de lluvias afecta mucho el cultivos.
Esta semana disminuyó el costo del chile serrano a 60 pesos el kilo; la cebolla bajo a 25 pesos el kilo; el limón se mantiene a 10 pesos el kilo; el jitomate bajo a 14 pesos el kilo; el pepino se mantienen a 22 pesos el kilo, el nopal a 25 pesos el kilo sin espinas y con espinas 20 pesos el kilo; por lo que respecta a este último se estima que hasta el mes de febrero disminuya su costo de 13 pesos el kilo y se mantenga ahí en ese costo.
Asimismo, señaló Maldonado que los precios varían de un día a otro depende de las heladas en la cosecha.
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Por su parte, Erick Martínez encargado de un local de verdura externó que esta semana han bajado notablemente los precios de las verduras y hortalizas a comparación de la semana pasada; el chile serrano se encuentra en 60 pesos el kilo; jitomate en 15 pesos el kilo; cebolla a 20 pesos el kilo; limón a 18 pesos el kilo; tomate a 14 pesos el kilo.
De la misma manera se validó el costo de las verduras en el supermercado, el cual pudimos notar que algunos de los productos siguen en incremento aunque en la Central de Abastos y en el Mercado Hidalgo ya han bajado, tal es el caso de los chiles serranos que continúan en 89 pesos el kilo; calabaza en 37 pesos el kilo; chile jalapeño en 49 pesos, zanahoria en 12 pesos el kilo; nopal 29 peso el kilo.
José Ventura Santos Serrano como encargado de una cocina económica comentó que en esto días que el chile serrano estaba costoso, realizaron guisados que no usara el chile serrano y si lo usaba para hacer salsas y venderlas se veían obligados a servir menos porción.
Carmela Rivera clienta de una tienda de verduras dijo que estaba muy difícil comprar un kilo en 120 pesos el kilo para reparar alimentos; por lo que recurría a alternativas de preparación.