CORTAZAR, Gto.- Gracias al apoyo de la ciudadanía en general, alumnos, personal docente y directivos del Colegio Alfonso García Robles, el gobierno municipal, a través de la Jefatura de Medio Ambiente, hizo entrega de aproximadamente 400 kilogramos de tapitas de plástico a la Asociación Chispitas de Felicidad.
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Las mismas serán destinadas a su venta para la elaboración de pelucas oncológicas y tratamientos de pacientes que padecen Cáncer. Chispitas de Felicidad es una organización sin fines de lucro, dedicada a promover filantropía en México, llevando y compartiendo felicidad, mejorando las condiciones de vida de las personas con enfermedades crónicas o con discapacidad, promoviendo una participación social.
Promueve y gestiona redes de donadores y voluntarios cuyos esfuerzos son canalizados a programas para fortalecer a la organización y contribuye el desarrollo humanitario, basado en la metodología participativa y en los derechos de igualdad e inclusión.
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En el caso de Cortazar, trabaja coordinadamente con el municipio y el sistema DIF, y una de sus formas de financiar esfuerzos es la recolección de tapitas, para lo que se pide la colaboración ciudadana para recolectarlas y depositarlas en contenedores, el producto de venta ayuda a financiar las pelucas oncológicas y sustitutos para mujeres que padecen Cáncer, así como tratamientos a personas.
En materia de salud, Chispitas de Felicidad tiene el objetivo de orientar, prevenir, diagnosticar, canalizar y realizar tratamientos de salud para mejorar la calidad de vida de las personas, por lo que participa en Ferias de la Salud e imparte pláticas y talleres de Salud Psicológica, Salud bucal y Salud general.
Participa con empresas privadas, instituciones educativas públicas y privadas, colectivos y dependencias de gobierno, teniendo impacto en Salvatierra, Tarimoro, Cortázar, Villagrán, Juventino Rosas, Comonfort, Empalme Escobedo, Salamanca, León, San Luis de la Paz, Pénjamo, Tarandacuao, Apaseo el Grande, Jerécuaro, Apaseo el Alto, Acámbaro, Yuriria, Dolores Hidalgo, San Miguel de Allende, San José Iturbide, Moroleón, Uriangato, Jaral del Progreso y Celaya, beneficiando a unas 3,500 personas al año.