CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- En plena luz del día, dos vecinos de la colonia Monte Blanco se dan a la libre tarea de llevarse el cableado y materiales eléctricos, así como varillas y todo tipo de metal que sea posible para su venta, dejando en ruinas el edificio que por muchos años fue licorería, así como un inmueble de moderno diseño arquitectónico, ambos ubicados en esquina de la calle Hidalgo y Francisco Juárez.
“Yo vivo en la calle, y por un tiempo estuve viviendo en este lugar abandonado”, dijo uno de los dos hombres que pelaba cables que antes había sustraído de ambos edificios.
Todavía el viernes pasado, el edificio de la antes licorería había sido cerrado con cadenas y candados en sus puertas principales, pero en otra de las entradas fue vencido y abierta la cortina, durante la mañana de hoy, por los sujetos que se estaban dedicando a sacar todo tipo de material para su reventa.
“¿Usted es el dueño?”, preguntó al fotógrafo que tomaba evidencia del momento en que las dos personas entraban y salían del moderno diseño arquitectónico que tendrá más de 10 años abandonado, al igual que lo que era la licorería.
“Es que queremos trabajar para el dueño, si nos da chamba. Yo ando casi siempre frente al Seguro Social, y duermo donde sea. En un tiempo dormí aquí, pero ahora duermo en otra partes”, dijo uno de los hombres cuando se percató que era tomado en cuenta por el lente del reportero gráfico.
“Nosotros venimos de la Monte Blanco, y estamos aquí, pasándola”, comentó el más joven que había estado dentro del domo de moderna arquitectura, espiando por una de las ventanas ya sin cristal, ni arco, sentado en cuclillas.
Cuando recibieron la respuesta de que no era el dueño, sólo un reportero gráfico, los dos hombres le encargaron que si veía al dueño le dijera que querían chamba, de lo que fuera; y después volvieron a entrar al inmueble del terreno baldío, y más tarde salir con fierros y alambre de cobre.
Cabe señalar que la licorería y sus oficinas, también están desmanteladas, sin puertas, ventanas, cristales y cableado eléctrico, a pesar que los dueños han colocado cadenas y candados.