CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Por la ya extensa transición del gobierno federal, se encuentran en tensa incertidumbre más de dos mil trabajadores, tanto de confianza como de base de las dependencias federales que se ubican en Celaya, como la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), Clínica y Delegación del ISSSTE y Fovissste, así como Hacienda y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), antes Sagarpa.
En el caso de la delegación del ISSSTE, este viernes pasado, entregó el delegado Primo Quiroz, quien reconoció, que en los últimos días, han sido dadas de bajas varias trabajadoras de confianza de Turissste y otras áreas, pero el personal administrativo y operativo, que suman más de cinco mil en las distintas clínicas en Guanajuato, temen los recortes no sólo en los primeros mandos, sino en trabajadores con planta.
En el caso del Fovissste, Jorge Rodríguez Corona se quedó como encargado de la Jefatura del Departamento de Vivienda en Guanajuato, que estaba a cargo de la delegada Cecilia Simón, quien hace un mes presentó su renuncia por causas personales.
Rodríguez Corona expuso que sólo iba a estar un mes como encargado de la Jefatura, y que será desde oficinas centrales de donde será elegido y enviado el nuevo delegado o encargado de dicha dependencia.
En la Comisión Nacional del Agua (Conagua) son los más de 220 trabajadores, donde continúa con encarada de despecho, desde finales del año pasado, Patricia Quintero, quien se quedó al frente de la dependencia federal cuando el entonces delegado, Humberto Navarro de Alva, decidió abandonar el cargo por aspiraciones políticas.
El personal de CONAGUA vive un constante temor, debido a que en los primeros días de febrero, una veintena de trabajadores, con más de 30 y hasta 40 años laborando en la dependencia, recibió un documento, en donde se les informaba que habían sido dados de baja y que ya no se presentaran a laborar.
En respuesta, los trabajadores se manifestaron fuera de las instalaciones de Conagua, en su horario de descanso, manifestaron que no presentarían su renuncia, y en caso de ser despedidos, exigían la liquidación de ley.
Los trabajadores, muchos de ellos mujeres, decidieron volver a su área de trabajo y no presentar su renuncia; hasta este viernes todavía se encontraban laborando, al igual que la encargada de despacho, Patricia Quintero; pero en particular, los trabajadores de planta y de confianza temen ser despedidos, y todo por un cambio de gobierno federal que ha generado la misma sensación de miedo e incertidumbre en la misma base trabajadora, dicen.
Por su parte, María Elena Guerrero Guerrero, secretaria Estatal del Sindicato de Hacienda en Guanajuato, dijo que de los 380 trabajadores sindicalizados en todo el estado, ninguno ha sido dado de baja por la transición del gobierno federal; sólo se dio en Irapuato, pero con trabajadores de confianza.
María Elena Guerrero Guerrero comentó que cuentan con el respaldo del sindicato nacional, por tal motivo, confía que no se den despedidos de los 380 trabajadores sindicalizados, de los cuales 80 son de las oficinas de Hacienda, Celaya.
El mismo sentimiento de incertidumbre existe en los trabajadores de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, antes Sagarpa, misma que quedó acéfala por varios meses, hasta que recientemente nombraron como encargado de despacho al ingeniero Jorge Felix.
Por comentarios de los especialistas y trabajadores de base y de confianza, hasta el momento no se han dado despidos en SADER, pero al igual que las demás dependencias federales, también hay temor de que en cualquier momento llegue la orden de recortar personal.