El Obispo de la Diócesis de Celaya agradeció a Dios por un año más de vida

Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma mencionó que cada año va uno adquiriendo más experiencias

Ana Medina | El Sol del Bajío

  · miércoles 6 de abril de 2022

Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma indicó que mientras Dios no lo llame a su presencia, continuará sirviendo a los demás hasta su último suspiro. | Foto: Alfonso Berber | El Sol del Bajío

CELAYA, Gto.-(OEM-Informex).- Durante la celebración de su cumpleaños 57, el Obispo de la Diócesis de Celaya, Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, recordó que desde los nueve años y luego de haber sufrido un accidente fatal, ha dedicado su vida a Dios, a quien agradece por todas las gracias que le ha concedido,también agradeció a su familia y a todas las personas que lo han acompañado a lo largo de su vida.

El Obispo mencionó que en este día tan especial se siente agradecido con todas las personas que lo estiman, lo quieren y lo acompañan en esta nueva diócesis que le tocó encabezar hace menos de un año y a quienes trata de servir dando lo mejor de sí, además recordó que a los nueve años Dios lo salvó de un accidente fatal y fue desde ese momento que decidió dedicar su vida entera a servirlo como se merece.


Mencionó que “cada año va uno adquirien do más experiencias. Creo que es el tiempo más oportuno para poder darte cuenta que la vida es corta, cuando uno voltea hacia atrás y ves el camino, dice el poeta, que no volverás a recorrer, pero lo miras con mucha gratitud y sobre todo con el agradecimiento de haber tenido tantas experiencias de dolor, de alegría, de estar en tu tierra, fuera de tu tierra, de compartir con sacerdotes, con religiosos,religiosas, con muchos laicos”.

“Estar en distintos puntos del territorio nacional, con experiencias de distintos grupos de personas que te van enriqueciendo, lo más importante de la vida es cumplir años y llenarte de experiencias, cumplir 57 años es llenarnos de más experiencias cada día”.

Indicó que mientras Dios no lo llame a su presencia, continuará sirviendo a los demás hasta su último suspiro y seguirá aprendiendo todo lo que la vida tiene para ofrecer. “No sé cuántos años más me conceda e Señor, pero siempre estaré con esa misma actitud optimista, agradecida y comprometida”, finalizó el Obispo.

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