CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Don Manuel Montero Carrillo, vecino de la colonia Insurgentes, de 81 años de edad, duerme en la calle desde el pasado viernes, protegiéndose del frío y la lluvia con bolsas de plástico, pues según argumenta fue víctima de un desalojo injustificado por parte de un grupo de licenciados, quienes lo sacaron de su vivienda, sin presentarle los documentos correspondientes.
Manifestó que la persona que se nombraba como nuevo propietario de la vivienda era un licenciado, quien según argumentó, no le mostró ninguna identificación, ni le entregó ningún tipo de documento que avalara la propiedad, la orden de desalojo o un recibo de la diligencia realizada, a pesar de que él se los sugirió.Don Manuel Montero Carrillo
Entre bolsas de plástico y algunos trapos viejos es como el señor Manuel Montero pernocta desde el pasado viernes en la banqueta que se encuentra al exterior de su domicilio, pues asegura que fue víctima de un desalojo injustificado, por parte de la licenciada Griselda Rojas, quien le imputó un pagaré por 200 pesos por concepto de honorarios, por perder el juicio de la venta de una fracción de su vivienda.
Indicó que en 2002 vendió un local que tiene en su casa a una maestra; sin embargo, ella no respetó las cláusulas del contrato de venta y dejó abandonado el inmueble, por lo que procedió a poner una demanda; sin embargo, esa situación le causó conflictos por los que ahora tiene que responder.
La vivienda de la que fue despojado se localiza en el número 217 de la calle Vicenta Elizarraraz, en la colonia Insurgentes, donde el pasado viernes a las 7:00 de la mañana, cuando aún se encontraba dormido, fue desalojado por parte de la actuaria, misma que acudió en compañía de una patrulla de la Policía Municipal y cargadores, quienes comenzaron a sacar sus pertenencias a la calle.
“Yo lo considero como una injusticia, porque esas personas no tienen ningún fundamento para hacer lo que hicieron”, indicó el señor Montero, añadiendo que su familia no está enterada de su problema, debido a que no se encuentra en Celaya, por lo que no cuenta con apoyo alguno, más que el de algunas personas que se compadecen de él y le han brindado orientación para manejar su actual situación.
El señor Montero se dedica a la venta de artículos de bazar en un tianguis; sin embargo, al permanecer sus pertenencias en la calle se mojaron con el agua de la lluvia, por lo que solicitó ayuda de la ciudadanía para poder salir adelante de su problemática.