CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Bajo el lema: “Su misericordia se extiende de generación en generación”, este domingo la Iglesia Católica celebró la “III Jornada Mundial de los abuelos y de los mayores”, en la que, el padre José de Jesús Palacios Torres, Vocero de la Diócesis de Celaya, los reconoció por la riqueza con la que han entregado su pasado para construir el futuro e invitó a la sociedad en general a que los respeten, los traten con la dignidad que merecen y les den oportunidad de demostrar la fortaleza, las capacidades y cualidades que todavía tienen y con las cuales pueden contribuir mucho.
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El sacerdote reconoció a todos los abuelitos y adultos mayores por todo lo que han hecho por la sociedad y la familia, por su amor incondicional, por dar la vida a los padres, por cuidar a los nietos cuando los papás se van a trabajar, por sus méritos, su presencia y su validez.
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Indicó que es necesario que la sociedad tenga conciencia sobre el papel tan importante que tienen los abuelos en la familia y la sociedad, ya que muchas veces son considerados como personas que ya no producen, sino que solo consumen, por tal motivo, difícilmente pueden encontrar un empleo digno o “actividades que les puedan ayudar en su caminar de vida”.
De igual forma, espera que las empresas e instituciones abran espacios para dales cabida, porque muchos de ellos ya son jubilados o fueron despedidos y difícilmente consiguen otro empleo porque ya no producen lo mismo, sin embargo, considera que existe quienes todavía tienen mucha fortaleza, capacidades y cualidades con las que pueden contribuir, lo cual les ayuda a sentirse útiles y valiosos en la comunidad.
Asimismo, dijo que “no quiero pensar que los adultos mayores que están en la calle pidiendo dinero pudieran estar siendo explotados como se ha dicho con los niños, si fuera así que triste que lleguemos a una sociedad donde se utilice a una persona que, a función de los sentimientos, genere dinero, mientras que quien tiene todas las capacidades para trabajar sea el que reciba los beneficios”.
También dijo que existen personas que cuando son niños se pelean con sus hermanos por la mamá, pero cuando son adultos ya no le hacen caso y quieren deslindarse de la responsabilidad de su cuidado porque tienen ocupaciones, trabajos y actividades que no quieren dejar de hacer.
Desafortunadamente, dijo, este sector de la población en ocasiones es utilizado para promover los programas sociales, los cuales están desde administraciones anteriores. Indicó que lo que se les da es un reconocimiento federal, el cual está bien, excepto cuando se politiza y termina redituando políticamente a través de beneficios como el voto, entre otras cosas.
“El gobierno es responsable de asumir estos programas sociales, pero no puedo colgar el logotipo de mi partido, eso lo debe entender el gobierno. Las personas deben entender que todos los programas sociales son de gobierno, este programa existía antes de este gobierno, pero fue modificado, quien quede se ve obligado a cumplirlo, a menos de que haga una reforma para ampliarlo o posponer la edad”.
Recordó que antes la sabiduría de los adultos mayores era lo más preciado de la sociedad, por tal motivo, ellos se encontraban al centro de la familia, sin embargo, ahora dejó de tener importancia porque no genera nada económicamente, por lo que, ahora lo que se ha puesto al centro es la producción y quien produce es quien resulta ser útil. Finalmente, reiteró su llamado a que las familias inculquen a sus hijos el respeto por sus abuelitos y los adultos mayores en general.