CELAYA, Gto.- Por devoción y para cumplir una manda, desde hace nueve años José Delgado ha dedicado parte de su vida a la restauración de la parroquia de San Miguel Arcángel, ubicada en el Barrio de San Miguel. Previo a los festejos del arcángel, acudió diariamente junto con Carlos Ramírez para restaurar las paredes, el altar de las ánimas, y realizar las decoraciones de las bóvedas y dejarlo presentable para la festividad, porque aún falta mucho por hacer, dijo. Estos trabajos representaron una inversión de 30 mil pesos con recursos propios y con apoyo de la parroquia.

➡️ Suscríbete a nuestra edición digital

Platicó que su papá, Gerardo Delgado “siempre apoyó al Barrio de San Miguel porque era originario de este lugar y lo hacía pintando los carritos alegóricos, pintando los paisajes para los telones de las Tres Caídas en la Semana Santa y haciendo trabajos de restauración en el altar que en ese tiempo estaba decorado de blanco con dorado, pero uno de sus proyectos era cambiar esta decoración a mármol, sin embargo, ya no lo pudo hacer porque falleció”.

Te puede interesar ➡

“Yo soy pintor y hago imitación de mármol y decoración de molduras, por devoción también empecé a hacer trabajos de restauración en la parroquia, pero después de que mi papá falleció, por manda, comencé desde hace nueve años a dar continuidad al proyecto que él tenía, porque antes el lugar estaba muy deteriorado. Ahora hemos avanzado mucho con el apoyo del padre Alfredo Picón, párroco de este lugar, al cual le agradecemos mucho por toda la ayuda que ha brindado a los habitantes del barrio”.

Detalló que hace nueve años se hizo el cambio a imitación a mármol con dorado al altar, en esa época dijo, los apoyó mucha gente y se invirtieron cerca de 80 mil pesos. Al año siguiente, decoraron el altar de las ánimas y después se realizarían los trabajos de restauración de la cúpula, pero el proyecto quedó estancado hasta apenas el año pasado.

Señaló que en 2022 comenzó la primera etapa de estos nuevos trabajos que consistieron en restaurar y decorar la cúpula, en la cual se invirtió cerca de 40 mil pesos con recursos propios y tardó aproximadamente dos meses en terminar.

En la segunda, la cual comenzó este año, se trabaja en la restauración del altar de las ánimas, también se están haciendo listones, es decir, decoraciones de figuras que llevan las bóvedas y se arreglan las paredes que se encuentran deterioradas. Para estos trabajos, aseguró, se han invertido 30 mil pesos aproximadamente.

“Es mucho trabajo el que necesita la parroquia por dentro. El padre Alfredo Picón está contento con los trabajos que hacemos, por eso decidió darnos un apoyo con una parte de los recursos que se obtienen en la parroquia y de la gente que se ha acercado a donar. La idea es que lo que resta del año sigamos trabajando para ver si logramos terminar todo el templo”.

Mencionó que la gente que los quiere apoyar con recursos económicos les han preguntado cómo pueden hacerlo, “y siempre les respondemos que nosotros no recibimos el dinero directamente, sino que pueden ir a la oficina y decir que quieren donar para la restauración del templo, dejan su donativo y se les da un recibo. Después cuando nosotros necesitamos algún material lo compramos con nuestra bolsa, llevamos la nota a las oficinas y nos lo reembolsan”.

Comentó que estas restauraciones también son parte de los festejos por los 50 años de vida parroquial y de la festividad de los arcángeles San Miguel, San Gabriel y San Rafael. Para la fiesta lo dejaron presentable porque dijo “para dejarlo 100% terminado aún nos falta hacer mucho trabajo”.