Celayense crea banda de guerra y salva a jóvenes de las adicciones

“Dorados de Villa” realiza una labor altruista enseñándoles los toques marciales

Monserrat Maldonado | El Sol del Bajío

  · domingo 11 de diciembre de 2022

“Los jóvenes tienen talento solo hay que pulirlos”, dijo el instructor Miguel Díaz. | Fotos: Adrián Mendoza | El Sol del Bajío

CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Como una forma de aportar “un granito de arena” a la sociedad en la formación de niños y jóvenes con principios y valores, el instructor Miguel Díaz López creó la banda de guerra “Dorados de Villa”, con la que realiza una labor altruista enseñándoles los toques marciales, con lo que ha logrado incluso que algunos salgan de las adicciones.

Al no recibir ninguna forma de pago por la labor que realiza pide a la sociedad que apoye en especie o con donativos, ya que detalló que al ser invitados en algún evento pueden recibir la donación de escudos de la banda de guerra, playeras tipo polo, tambores y trompetas.

"Hasta este momento dispongo de 10 tambores que prestó a los niños y jóvenes para que comiencen a aprender", explicó Miguel Díaz.

Con esto, más jóvenes se pueden ser beneficiados, ya que en más de una ocasión en estos 17 años los jóvenes han salido de problemas familiares y de adicciones. “Sí les ayuda a varios muchachos el tener una actividad cívico militar, ya que entran a una disciplina y una distracción sana”, dijo el instructor.


El punto de reunión es la explanada de Parque Morelos todos los sábados de 2 a 4 de la tarde, y lo único que necesitan es solamente las ganas de aprender, refirió el instructor Díaz López, ya que pueden ir niños desde los 6 años de edad hasta adultos.

“Los interesados pueden acudir sin ningún conocimiento, ya que se les enseña desde cero desde cómo tomar las baquetas y cómo colocarse el tambor”, refirió el instructor.

Al estar integrado por 45 personas, la mayoría son mujeres y en un menor número son hombres con cinco trompetistas, además, explicó que la mayoría son de secundaria y preparatoria.

Después de la pandemia, esperan con los brazos abiertos a los nuevos integrantes, ya que no solo son de Celaya, sino también cuentan con algunos elementos de Villagrán y Apaseo el Alto. Las ganas de continuar haciendo esta loable acción lo motiva a cada semana acudir a las clases, ya que aunque es de Celaya tiene que trasladarse de Apaseo el Alto en transporte público y los eventos en la tarde.

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