CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Entre 6 y 7 de cada 10 mujeres trabajadoras de la zona rural, se encuentran en el comercio informal, afectándoles con ello que se abaraten sus productos, y no logren rendimientos a su esfuerzo, de ahí que la tarea del gobierno del estado no sólo es rescatar a las mujeres del comercio informal, sino asesorarlas para que, incluso, aspiren a fortalecer sus negocios y logren exportar, dijo Anabel Pulido López, directora general del Instituto para las mujeres guanajuatenses, , quien encabezó ayer la celebración del Día de la Mujer Rural.
Dijo además, que de cada 10 mujeres de la zona urbana, 8 han sufrido violencia interfamiliar, disminuyendo con ello el espíritu para desarrollarse más allá de elaborar quesos y venderlos entre el mismo pueblo.Anabel Pulido López
Explicó que la falta de desconocimiento y asesoría, la mujer rural está en el comercio informal, y con ello no les permite empoderarse como debería, cuando tienen capacidad de exportar.
Detalló que las mujeres de la zona rural han sido poco valoradas, cuando es ella la que está sacando el trabajo adelante, después de que muchos de los padres de familia están viajando a los Estados Unidos.
Cuando el padre de familia emigra, la mujer rural tiene que hacerse cargo de las tierras, de los animales, de la venta de leche, queso, yogurt y otros derivados, pero lamentablemente la mayoría se encuentra en el comercio informal.
Reconoció que el machismo sigue siendo un gran problema para el desarrollo de la mujer rural, porque los patrones la obligan a vivir sumisa y dependiendo del esposo, cuando, por otro lado, cada vez son más las mujeres que se liberar de dicha cultura para salir adelante y ser parte de la aportación económica en la familia.
Dijo que la mujer guanajuatense es capaz de hacerse cargo de las tierras, de subir y conducir un tractor, de andar en caballo arreando el ganado, de hacerse cargo de maquinaria agrícola para sacar adelante la producción agrícola del estado.
Para concluir, reconoció que las instituciones de los tres niveles de gobierno, tienen una gran misión para apoyar a la mujer rural; primero, rescatarla del comercio informal; después, apoyarla para que su empresa se desarrolle a gran escala y hasta pueda exportar.