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León, Gto.- María del Rosario y Francisco Javier no se conocieron, pero tienen mucho en común. Ambos son guanajuatenses, a los dos los unió la pena de tener familiares desaparecidos, los dos exigieron justicia y movieron cielo, mar y tierra para encontrar a sus seres queridos, ahora ellos están muertos. Ella murió sin saber dónde está su hijo y él en una de tantas fosas clandestinas encontró el cadáver de su hermana, le quedó ese “consuelo”.
“Encontré a mi corazón”
La tragedia llegó a la casa de la familia Barajas Piña, la mañana del 29 de febrero de 2020, La maestra Guadalupe, conocida como “Lupita”, salió ese sábado de la casa de sus papás, ubicada en el centro de Salvatierra y ya no regresó. “Iba a la tienda”, dijeron sus familiares a vecinos y amigos. Rápidamente, comenzó una búsqueda desesperada a través de redes sociales, en donde fue boletinada su desaparición, con sus datos y su fotografía.
Marchas y manifestaciones para denunciar su desaparición y al mismo tiempo pedir la atención de las autoridades, inundaron el centro de Salvatierra, durante varios días. Al ver la poca reacción de los gobernantes, la familia comenzó a buscar a la joven de 32 años y con picos, palas y un buen sombrero para cubrirse del sol, iniciaron con la incansable labor.
Francisco Javier, dejó de lado sus actividades como abogado para buscar a su hermana, a quien encontró el 19 de febrero de 2021, después de un año de búsqueda, de varias fosas localizadas, de decenas de cadáveres encontrados. “Ya encontré mi corazón, ahora buscó a sus desaparecidos, por eso estoy aquí para ayudarlos en sus búsquedas”, Posteo en uno de los grupos que crearon en redes sociales, familiares de las personas no localizadas.
En el inter de la búsqueda de su hermana, Francisco, fue integrante de la Comisión Estatal de Búsqueda en Guanajuato. Lamentablemente, la tragedia volvió a llamar a la puerta de los Barajas Piña y cimbró en las más sensibles fibras de la sociedad, pues el 29 de mayo de 2021, el joven abogado fue asesinado a unas cuadras de su casa.
El crimen consternó y fue repudiado por diferentes organizaciones, colectivos y comisiones de búsqueda en todo el país. La misma Organización de las Naciones Unidas (ONU) también se manifestó al respecto, exigiendo justicia.
Un mes y una semana después, en los primeros días del mes de julio, la Fiscalía General del Estado, anunció la captura y vinculación a proceso penal de Rafael y Cesar Enrique, homicidas del buscador.
Una desaparición y dos muertes
La casa de la familia Cardona Zavala, ha sido escenario de homicidios, lesiones y una desaparición forzada. El recuento es de un joven desaparecido en 2019; dos personas asesinadas y dos hombres heridos. Para ninguno de ellos ha llegado la justicia.
El escenario es la casa ubicada en la calle San Valentino Berrio casi esquina con San Benedetto Manni, en la colonia Villas de San Nicolás.
La historia pública de la familia, comenzó el 23 de diciembre de 2019, cuando hombres armados llegaron al sitio y sacaron por la fuerza a Yatziri Misael de tan solo 16 años. Siendo esta la última vez que lo vieron.
Al no tener noticias de él, su madre María del Rosario de 43 años, comenzó con la búsqueda de su menor hijo. Ella colgó carteles que imprimió, presionó a la Fiscalía General del Estado, se sumó a un colectivo de búsqueda y recorrió parte del estado preguntando a las personas si alguien había visto a su hijo.
La familia sospechaba que el menor había sido reclutado por un grupo del crimen organizado, pero nunca se pudo comprobar. El 15 de octubre de 2020, la mujer fue a buscar a su hijo a un presunto punto de venta de droga en el Barrio de El Coecillo, donde le dijeron que lo habían visto, pero no lo encontró.
Al día siguiente, cerca de las siete de la mañana de ese viernes, algunos sujetos tocaron a la puerta, Rosario atendió al llamado y al abrir, le dispararon. Ella fue llevada al Hospital Pediátrico de León, pero murió al ser intervenida.
El último caso que puso en los ojos de la sociedad a la familia de la buscadora, ocurrió a las 17:03 horas del lunes 27 de junio de este 2022., cuando sujetos armados ingresaron al domicilio y comenzaron a disparar en contra de los tres hombres identificados como Jorge Ulises, Juan José y Jorge Arturo, de 27, 42 y 45 años de edad respectivamente.
Los dos primeros, son hijo y esposo de María del Rosario, el otro es un conocido de la familia. Jorge Ulises alias “El Güero”, murió en el mismo hospital que su madre y los otros dos hombres resultaron lesionados.
En el lugar del ataque, vecinos informaron que el ataque iba dirigido a un hombre integrante de la familia de apodo “El Pirrus”, hijo de María del Rosario.
A esta fecha, la justicia no ha tocado la puerta de la casa de la mujer buscadora, empezando por la ficha de búsqueda y la Alerta Amber por la desaparición de Yatziri Misael que permanece activa.
CIFRAS
En lo que va del año, con corte del 1 de enero al 31 julio de 2022, se han iniciado 1 mil 898 investigaciones por la denuncia de personas de las cuales se desconocía su paradero, en las que los municipios de León, Celaya e Irapuato, lideran la lista de los 46 municipios del estado de Guanajuato con 431, 240 y 223 averiguaciones en el tema, respectivamente.
Investigaciones por personas no localizadas, de 2012 a 2022:
- León- 5100
- Irapuato- 4082
- Celaya- 2782
- Salamanca- 1599
- Guanajuato- 1241
- Silao- 1054
- San Francisco del Rincón- 364
