CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- El Congreso Agrario Permanente (CAP) que agrupa a 11 asociaciones de todo el Estado de Guanajuato y representa a más de cinco mil productores, se reunió con representantes del gobierno estatal y federal a fin de definir políticas públicas en apoyo a los productores, ya que debido a la guerra entre Rusia y Ucrania, el precio por tonelada de fertilizante se incrementará de 7 mil pesos a 24 mil pesos, provocando además del incremento de productos básicos agrícolas hasta más del 50%.
“El fertilizante es un insumo básico para la producción agrícola. Mientras más se encarece, más costosa se vuelve la producción en el campo. Toda la guerra tendrá como consecuencia un incremento en los precios del maíz, trigo e inclusive sorgo, materias primas que son sensibles para la canasta alimentaria de los mexicanos”, enfatizó la ingeniera Ana Luisa Ramírez Solórzano. representante como Agro A.C.
La también coordinadora estatal en turno del Congreso Agrario Permanente (CAP), en Guanajuato, encabezó la reunión en donde estuvo Libia Denis García Muñoz Ledo, de la Secretaría de Gobierno, en representación del gobernador Diego Sinuhe Rodríguez, y mencionaron sobre la necesidad de contar con el apoyo urgente del gobierno estatal y federal para afrontar un serio problema como es la falta o el incremento exagerado de los fertilizantes a raíz de la guerra.
Explicó que Rusia y Ucrania producen el 40% de fertilizantes de todo el mundo, y ambos países abastecen más del 80% de fertilizantes que utiliza México, y al cerrarse las puertas para la importación, se incrementará la tonelada de urea de 7 mil hasta los 24 mil pesos, pero en consecuencia se estima un severo incremento a corto tiempo en los productos agrícolas básicos no sólo de Celaya y Guanajuato, sino de todos los mexicanos.
Expuso que el margen de ganancia que tenían los productores, que era de 10 mil a 15 mil pesos, ahora ya no lo van a tener con estos costos elevados que en días ya estarán incrementándose, por lo que se les cierra las puertas a los productores, en especial a los pequeños.
Explicó que en Guanajuato hay una superficie agrícola de un millón 100 mil hectáreas, y cerca de un millón de productores, pero todos de alguna o de otra manera se verán afectados, y en suma, el impacto de la guerra se verá reflejado en el productor, el comerciante de los productos básicos, y el consumidor.
Apenas el pasado jueves el CAP presentó por escrito la agenda de necesidades de los productores guanajuatenses, y lo que viene en consecuencia de la guerra, en especial por el desabasto y los altos costos de los fertilizantes.
“Estamos generando un programa donde apoyen al productor para la adquisición del fertilizante. Se está generando una política pública con las organizaciones que conforman el CAP. Nos reunimos con la Secretaría de Gobierno, Secretaría de Desarrollo Agroalimentario y Rural (SDAyR), Secretaría de Desarrollo Económico y la Secretaría de Desarrollo Rural (Sader), del gobierno federal”, expuso.
Dijo que confía en que el gobierno federal y estatal den una buena respuesta para beneficio de los productores, por lo que dará inicio mesas de trabajo para darle seguimiento a la solución de los efectos negativos por parte de la guerra en México.
Como contexto, expuso que la superficie sembrada en el año agrícola ha pasado en promedio de un millón 100 mil a 966 mil hectáreas, teniendo una caída del 12%.
“Particularizando en la superficie sembrada bajo condiciones de riego, esta reducción fue de 518 mil a 473 mil hectáreas, con una disminución del 9%. Bajo condiciones de temporal, la superficie se redujo de 582 mil a 492 mil hectáreas, lo cual representó una caída del 15%”, expuso.
Para concluir dijo que, en cuanto a la producción agrícola, ésta pasó de 6 millones 836 mil a 9 millones 189 mil toneladas, lo cual representa un incremento del 34%. No obstante, lo anterior, es importante resaltar que la producción obtenida bajo condiciones de riego paso de 6 millones 108 mil a 8 millones 061 mil toneladas, con un incremento del 32%, mientras que en temporal pasó de 729 mil a un millón 128 mil toneladas, con un incremento del 55%.
