CELAYA, Gto.- Para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) compartió los resultados del Censo Agropecuario (CA), enfocado a las mujeres que participan en el sector agropecuario, en el cual se refleja que aún existe una brecha de género muy grande que combatir y, es que, de los más de 15 millones de puestos de trabajo como jornaleros y jornaleras que se registraron en todo el país durante 2022, solo un millón 697 mil 972 lo ocuparon las mujeres, quienes además ganaron 27 pesos menos que los hombres por jornal y fueron contratadas dos días menos que ellos por las unidades de producción.
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A detalle los datos indican que en 2022 se registraron 15 millones 863 mil 731 puestos de trabajo como jornaleros y jornaleras, de los cuales 14 millones 165 mil 759 fueron ocupados por hombres y un millón 697 mil 972 por mujeres, lo que representa el 89.3% y 10.7% respectivamente.
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Además, entre octubre de 2021 y septiembre de 2022, en promedio, las mujeres del sector agropecuario trabajaron siete horas al día al igual que los hombres, sin embargo, las unidades de producción solo las contrataron por 11 días, mientras que a ellos fue por 13 días. En el tema del salario, indica que por jornal a ellas se les pagó 201 pesos y a los hombres de 228 pesos, es decir 27 pesos menos que a ellos.
También refiere que de las 11 millones 120 mil 516 personas que estaban ocupadas de manera permanente, el 23.6% correspondía a mujeres y el 76.4% a hombres. Con respecto a los familiares que no recibían sueldo o salario por realizar actividades agropecuarias, la participación de las mujeres fue del 30.1% y la de los hombres del 69.9%.
Indica que 19 de cada 100 personas que eran responsables de las unidades de producción agropecuaria eran mujeres. Asimismo, los datos indican que, otras características sociodemográficas de las mujeres productoras es que el 45.8% tenía más de 45 hasta 65 años, el 20.5% más de 30 y hasta 45 años y el 23.0% tenía más de 65 y hasta 80 años.
El 67.9% tenía como máximo la educación básica, el 20.5% la secundaria, el 19.8% carecía de estudios y el 6.1% tenía el bachillerato o la preparatoria. Por otra parte, el 49.6% de las mujeres productoras se consideraba indígena y el 61.9% hablaba una lengua indígena. Además, una de cada 100 se consideraba afromexicana o afrodescendiente.