CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- El jueves llega la Virgen de Zapopan “La Pacificadora” a San Miguel Octopan, declararon José de Jesús Palacios, vicario de pastoral y vocero de la Diócesis de Celaya; y el licenciado Oscar Durán Jiménez, de vinculación parroquial de San Miguel Arcángel, con la esperanza de traer paz por medio de Jesucristo, a esta región que se ha visto herida por toda la violencia e inseguridad que se vive.
A las cinco de la tarde, el jueves 21 de febrero, en el Nicho de San Miguel Arcángel, en la entrada de San Miguel Octopan se espera la llegada de Nuestra Señora de Zapopan; hará un recorrido por las calles de: Francisco Villa, Morelos, Allende, Carranza, Nicolás Bravo, Madero, Abasolo, Josefa Ortiz de Domínguez, Juventino Rosas e Independencia.
Oscar Durán comentó que se llevará a cabo una misa de bienvenida, presidida por Monseñor Benjamín Castillo Placencia, en el atrio de San Miguel Arcangel a las 7 de la tarde, se invita que todos los visitantes porten una prenda blanca, simbolizando la esperanza de paz.
Se dará una serenata por parte de grupos y coros que durará toda la noche hasta que, a las nueve de la mañana, se le celebrará una misa de despedida a la Virgen que, ha viajado a muchas partes del país, e incluso, en noviembre del año pasado visitó la ciudad de Texas en Estados Unidos, compartió el Durán Jiménez.
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También en el 2018 las fiestas que se celebran durante el 12 de octubre en la Catedral Metropolitana, en Zapopan, en donde se reciben más de dos millones de personas, fueron declaradas Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por parte de la UNESCO.
Pacificadora, Patrona y Abogada, Generala de Armas, Reina de Jalisco, Madre de la Ciudad, Estrella de la Evangelización, son sólo algunos de los títulos que ha recibió a lo largo de los años esta imagen que, según se dice, fue hecha con cañas de maíz en Michoacán.
Se cuenta que durante la Conquista, en una batalla de españoles e indígenas, dos frailes que traían consigo la imagen de Nuestra Señora de la Concepción, hicieron rendirse a los naturales que fueron perdonados por el Virrey Antonio de Mendoza, desde entonces Fray Antonio de Segovia le dio el título de “La Pacificadora”.
Cabe mencionar que durante la procesión que acompañará a la Virgen irán las siete cruces que representan las siete heridas que sufrió San Miguel Octopan, que representan a su vez las heridas que han sufrido tanto el estado, en forma de la violencia que se está viviendo el país, se intenta que esta visita sea una forma de sanación, finalizó Oscar Durán.