CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- El muralismo y el grafiti se han convertido en una forma de expresión de los jóvenes celayenses, a través de los cuales buscan generar conciencia, promover la cultura e incluso demostrar sus sentimientos como la gratitud, tal cual quedó plasmada en una de las obras del bajo puente de Constituyentes como reconocimiento a los médicos que durante año y medio han atendido la pandemia de Covid-19.
Ante el confinamiento que provocó la pandemia, los artistas se han enfrentado a grandes retos, pero también han encontrado soluciones para continuar plasmando su arte en distintas partes de la ciudad.
Rafael González Bernabé, director del Instituto Municipal de la Juventud, mencionó que a pesar de que siempre el grafiti y el muralismo han existido, el gobierno municipal optó por atenderlo, y fue así que planteó trabajar en base a diversos temas en distintos espacios del municipio, con la finalidad de que los jóvenes y artistas puedan plasmar sus mensajes, como los que se ubican en la calle de Mariano Abasolo y Francisco Juárez que es alusivo al Día Internacional del Agua.
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Otro caso es el del trabajo realizado en la Avenida Constituyentes, donde se plasmaron los 450 años de la fundación de Celaya que incluyen la cultura otomí, personajes de las Batallas de Celaya, así como un reconocimiento al personal médico entre otros.
González Bernabé enfatizó que para el Instituto es muy importante conservar y generar espacios donde los jóvenes puedan plasmar sus sentimientos y formas de pensar, por lo que continúan impulsando el programa permanente de galerías urbanas.
“En primer lugar, el programa pretende darle a los chavos una manera de expresar sus emociones y sentimientos; y en segundo lugar se genera una actividad legal dándoles el acompañamiento para que pasen de conductas negativas a positivas e inclusive desarrollar sus planes de vida”.
SACAN A LA JUVENTUD DEL CONTEXTO DE VIOLENCIA
Cabe resaltar que este programa a su vez es reforzado con la invitación de personalidades externas que han tenido gran proyección, y que pueden transmitir sus experiencias para mejorar los entornos sociales.
Con este acercamiento se busca que los jóvenes puedan tener un plan de vida y que éstos salgan de contextos de violencia, drogas, pintar solamente con la pandilla, entre otros problemas. Lo anterior para que plasmen su sentir de manera más profesional con parámetros en donde se observen trabajos limpios, ordenados, competitivos, pero sobre todo en un ambiente de convivencia.
Diego Lara, coordinador de la Unidad de Cultura de Celaya Joven, externó por su parte que la Covid-19 también afectó al arte, ya que los proyectos que tenían en puerta tuvieron que ponerse en pausa.
Agregó que en estos momentos es complicado gestionar proyectos en gran formato, ya que requieren de un equipo integrado por varias personas, al trabajar en ocasiones de manera simultánea en varios murales a gran escala y para esto requieren de personas que ayuden a mover los andamios, pasar la pintura y herramientas, además de ser un lugar en donde los artistas comparten técnicas, vivencias o se prestan materiales.
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LA COVID TAMBIÉN AFECTÓ AL ARTE
Comentó que a la mayoría de los artistas el trabajo les ha bajado, por lo tanto el ámbito económico es el que más les ha afectado puesto que no viven del arte, y al tener empleos formales que les ayudan a solventar sus gastos tienen que trabajar más horas o definitivamente algunos se quedaron sin una fuente de ingresos y es complicado continuar con el arte urbano.
Algo importante de destacar es que la mayoría de los artistas dona en estos espacios públicos su arte, su diseño y su trabajo.
GRAFITI PROFESIONAL VS GRAFITI VANDÁLICO
Aunque reconocen los artistas urbanos que existe el grafiti vandálico, destacan la importancia de que se reconozca la diferencia entre el grafiti profesional, pues éste tiene como objetivo transmitir mensajes, vivencias y sentimientos.
Refirió el encargado del área de la Unidad de Cultura que es importe brindarles atención a todos, es por eso que en el IMJUV tienen un muro donde pueden practicar aquellos que van empezando.
“Es como cualquier profesión, tiene un arma de doble filo. En el grafiti se tienen artistas que lo hacen de una manera bien y se tienen artistas que lo hacen de una manera mal. Podría poner una metáfora: el aerosol y el pincel son un arma y si lo pones en las manos adecuadas es una manera de expresar algo bueno y si se ponen en las manos equivocadas va a degenerar el espacio, lo va a hacer feo, molestando a alguien por que están dañando la fachada o su puerta”.
FRANCISCO IBARRA
A sus 20 años de edad, Francisco de Jesús Ibarra Cornejo es un artista urbano, con ocho años de experiencia y asegura que ha encontrado en el muralismo la mejor forma de expresar sus sentimientos.
Y aunque como artista urbano se han detenido las actividades presenciales, en los días de aislamiento encontró nuevas oportunidades en las redes sociales, ya que ha dado a conocer su arte a través de estos medios electrónicos que le han ayudado a incrementar el número de seguidores en sus cuentas.
Así que hasta el momento no sé ha visto afectado por falta de trabajo, sino al contrario ha realizado trabajos independientes como plasmando diseños al interior de los negocios como barberías y decorativos en casas entre otros.