CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- La arquitecta, pintora y diseñadora Lucila Veloz Gutiérrez, oriunda de Guanajuato capital, estudió en la Universidad de Artes de Guanajuato, y desde hace 21 años reside en España, egresada también de la Universidad de Alcalá de Henares, del Instituto Nacional de Administración Pública, con varias exposiciones en su haber.
Hace cinco años, retomó la pintura de manera profesional, ya que ha sido una de sus grandes pasiones al igual que la arquitectura, está consolidada dentro de la pintura figurativa y lo abstracto.
Desde niña supo que quería pintar, aunque tuvo varias pasiones como la arquitectura y arte, ya que van de la mano y eso es lo que le ha permitido hacer de todo un poco.
Lucila siempre ha pensado que la arquitectura es parte de las bellas artes, aunque se vea más técnica que una pintura o una escultura.
En una ocasión, Elio Berhanyer, uno de los últimos grandes nombres del mundo del diseño y de la moda, le dijo que le tenía envidia de la buena, porque era arquitecta, diseñadora y pintora y siempre le preguntaba que por cuál se inclinaba más.
Asimismo platicó que sus primeros dibujos del primer año de arquitectura, recuerda que fueron seleccionados para exponerse en el museo Diego Rivera, lo que la llenó de orgullo y la marcó de por vida por la importancia del lugar y el auge que tuvieron sus dibujos.
Ahora que reside en España, trata de llevar siempre declaratorias de patrimonio de la humanidad, tratando de tomar costumbres, cultura de los lugares que visita, para así inspirarse en su trabajo.
Su motivo de visita a la ciudad cajetera fue familiar y cultural, ya que en días pasados sostuvo una charla en la universidad de Guanajuato y con el Colegio de Arquitectos e instituciones culturales, para mostrar el nuevo proyecto, “Mujer arte y naturaleza”, en afán de sumar y reflexionar que en pleno siglo XXI estén viviendo mal las mujeres.
Donde hace una explicación con una base científica, desde los avances de la neurociencia de cómo funcionan los cerebros, ya que a la mujer siempre se le ha dado la intuición femenina y al hombre la cuestión racional, pero sólo es un mito ya que todos tenemos la intuición.
Dos de las mujeres que Lucila admira son Hilmaaf Klintquien fue una artista sueca especialmente conocida por ser pionera del arte abstracto y Carmen Mondragón una de sus ídolos a seguir, ya que escribía maravilloso y fue la primer mujer que uso minifalda en México.
En su recorrido por Celaya, quedó fascinada con el museo de arte Octavio Ocampo, donde disfrutó al máximo de las obras metamórficas del celayense.
También fue autora del proyecto integral, siendo uno de los originales del parque Xochipilli, en la etapa de Carlos Aranda, dándose después el tema del cuidado de las áreas verdes donde se formó el grupo Xochipilli para rescatar en ese entonces el último pulmón verde, del cual fue presidenta.
Llegó a Celaya desde muy niña por el trabajo de su padre, ya que trabajaba en Petroquímica y tiempo después por sus pasiones e inquietudes, decidió emigrar a la Capital, uno de sus lemas es “Para que sea arte tiene que sanar, si no se queda en una pintura”.
